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El arcipreste de Siero y párroco de Llanera, José Julio Velasco, fue el encargado de pregonar las fiestas de San Pedro de Andés (Navia), donde ejerció a principios de los noventa

Andés, mi Ítaca, a la que siempre me apetece volver

El agradecimiento a un pueblo de una belleza natural indescriptible y unas gentes de primera

El pregonero, con los alcaldes de Llanera y Navia, y vecinos y familiares.

Miembros de la asociación de vecinos, Julio y Luci, mis padres, vecinos y amigos de Andés y Navia, amigos de Llanera que me acompañáis, señor Alcalde de Llanera, editor d El Tapín e insigne pregonero de la gran fiesta del verano de Asturias los Exconxuraos, María Eugenia, buena amiga de Navia que siempre está a mi lado en los momentos importantes de mi vida, amigos todos, muchas gracias por vuestra presencia.

Gracias Almu por tus palabras cariñosas y exageradas hacia mí; fruto, sin duda, de la entrañable amistad que nos une y que perdura en el tiempo. No en vano yo soy su padrino de confirmación y yo la case en el Santuario de Villaoril, comprenderéis que me sienta pleno y feliz viendo como el paso del tiempo hizo de ella una mujer inteligente, de bien y al servicio de la comunidad como vicepresidenta de la asociación de vecinos€ Algo, aunque sea una pizca, tendrá que ver tu padrino (es broma).

Quiero comenzar recordando a todos los difuntos de la parroquia, esas personas que otros años estuvieron con nosotros y que llevamos siempre en el corazón, que Dios les premie todo el bien que hicieron.

Decía Baltasar Gracián que "lo bueno si breve, dos veces bueno" y añado yo, que "lo malo si breve, menos malo". Me conocéis y sabéis que seré breve.

Quiero comenzar agradeciendo a la asociación de vecinos de Andés este detalle de confianza hacía mi al elegirme pregonero de las fiestas de San Pedro 2016. Estoy emocionado, agradecido y honrado por tal distinción. Poco original podré ser, porque me han precedido insignes pregoneros que conocen mejor el pueblo y sus gentes que yo.

Esta noche tengo la oportunidad de reencontrarme con vosotros y "donde en verdad hiciera muchas amistades y donde me regalasteis lo posible" como bien dijera el tan recordado Ingenioso hidalgo don Quijote de la mancha cuando regresó a su aldea.

Hoy se agolpan en mi recuerdos entrañables e imborrables de mis cuatro años de sacerdote con vosotros del año 90 al 94.

Me gustaría, como me dicta el corazón, tener una palabra agradecida para cada uno de vosotros, pero comprenderéis que es imposible.

Este pregonero que os habla, viene cargado de afecto a este pueblo que tanto y tan bueno sembró en mí.

"Si alguien ascendiese al cielo y examinase con atención la maravilla del mundo y la hermosura de las estrellas, el asombro que semejante espectáculo le produciría sólo se convertiría en gozosa excitación si tuviera con quien compartirlo"; así lo afirma el filósofo romano Cicerón en su libro "La amistad".

Este día, entrañable, rodeado de familia y amigos, en este precioso pueblo de Andés, cobra verdadero realce porque lo puedo compartir con vosotros.

Cuentan las viejas leyendas griegas que Ulises en los 30 años que estuvo alejado de Ítaca, su hogar, siempre tuvo presente su tierra, sus gentes y la idea de volver a su casa. Andés es mi Ítaca y a la que siempre me apetece volver, por eso cuando Maxi, el presidente de la asociación me propuso, hoy, hace un año, que fuese el pregonero de las fiestas este año, no dude un instante en ponerme a su disposición porque ello significaba volver a Andés y reforzar, aún más, mis vínculos con esta tierra que tanto quiero.

Andés es un precioso pueblo de la costa occidental, situado entre Puerto de Vega y Navia; cargado de historia y cuya actividad principal es la agricultura y la ganadería, con espacios destinados, aunque cada vez menos, a maíz, trigo, fabes y patates, todos ellos de primera calidad.

El campo San Pedro es el corazón del pueblo donde se encuentra la iglesia parroquial, el campo de fútbol, este local de la asociación de vecinos y radio sedna.

Como pregonero quiero decir a los cuatro vientos que Andés posee una belleza natural indescriptible, un encanto especial y unas gentes de primera, con un tejido asociativo envidiable, que para sí quisieran muchos pueblos. Andés posee una asociación de vecinos de larga trayectoria, ejemplo de trabajo a favor de su pueblo, cargada de iniciativas para el bien de sus gentes, escuchan inquietudes y sugerencias y luego trabajan para hacerlas realidad. Enhorabuena por vuestro trabajo. Así mismo Andés cuenta con un club de fútbol que es referente para muchos y que mima la cantera y cuenta con un presidente, Cantina que es un pulmón del trabajo y del trabajo bien hecho con la ayuda inestimable de su junta directiva. Y que decir de radio Sedna, informando a la comunidad desde un servicio de comunicación cercano, objetivo y veraz. Permitidme a las tres entidades mencionadas, una sugerencia€ presentad a Andés para "Pueblo Ejemplar"; de momento no sois pueblo ejemplar, que lo seréis, pero lo que si sois es "Ejemplo de Pueblo". Andés es pequeño en número de habitantes pero grande en corazón, iniciativas, creatividad, servicio, unión y solidaridad.

Dice Miguel Delibes que la patria "es la infancia" y mi infancia sacerdotal estuvo aquí, en este pueblo y con sus gentes.

Llegué con 25 años a Andés, joven e inexperto en las lindes pastorales, era mi primer destino pastoral; aquí me acogisteis, me abristeis vuestras casas, me hicisteis uno de los vuestros y me ofrecisteis vuestra amistad; no sabéis lo que esto significa cuando uno llega a una parroquia y no conoce a nadie. Con vosotros aprendí que no basta conocer el amor, sino que hemos de traducirlo en obras; no basta hablar del prójimo, hemos de hacerle sitio en nuestro corazón; no basta decir palabras bonitas, sino que hemos de obrar gestos generosos; también aprendí que siempre existe una nueva oportunidad y que compartir es mejor que tener y lo importante que es permanecer siempre unidos para alcanzar las metas; de vosotros aprendí, también, que los fracasos y las dificultades son las mejores lecciones de la vida. Guardo recuerdos preciosos de trabajo pastoral con los jóvenes, catequesis, convivencias de preparación para la confirmación (una de ellas a Vigo, un fin de semana para encontrarnos con mi antecesor D. Fermín) que bien lo pasamos con cantos, talleres, charlas y también ocio, verdad Diego y Luis; festivales de navidad con portales de belén vivientes que parecían estampas, cuantas tardes preparando todo para que estuviera en su punto ( ¿os acordáis? Diego, Luis, David, Rosana, Sonia, Elena, Cristina, Aída, Almudena, Rocío, Elda, Loreto, Silvia, Josefa, Pablo, Pedro, Belén, Silvia, Yolanda, Ana, Loren, Hugo e Irma); actuaciones de gran calibre con los auténticos showman Loren y Hugo haciendo de martes y trece, recuerdo que sus actuaciones eran las más esperadas y las más aplaudidas; cabalgatas de reyes; encuentros de jóvenes de confirmación en el Santuario de Villaoril; que decir de mis fieles sacristanes Diego, Luis y a veces con la ayuda de David (que en paz descanse) siempre a mi lado, siempre ayudando y haciendo el bien pero alguna vez compartiendo conmigo alguna locura como meternos 8 en aquel Opel Corsa que yo tenía camino de la playa de Navia y donde anduvimos varios metros por el prao. O alguna vez que tirábamos de freno mano en el coche en el campo San Pedro, en fin€ En esos años se forjó una amistad auténtica que perdura hasta la fecha.

Hace unos años, en un encuentro aquí en Andés, recordamos juntos esos viejos tiempos, algunos no pudieron asistir; Luis, Almu, Diego, Irma, organizar otro a ver si somos capaces de juntarnos todos, sería genial y gozoso.

Voy terminando, pero no sin antes agradecer a Casa Calvario su acogida, cariño y comprensión; tu café Mari sigue siendo buenísimo; gracias a Casa el Bígaro, donde tantas tardes pase y compartí momentos inolvidables, gracias a Casa Candelo donde probé el mejor chorizo del mundo , gracias a Balbi, buena persona y fiel colaboradora , gracias a Tere San Pedro, que siempre aportaba su consejo atinado y prudente; gracias a Pepe París y a Aurelio, dos amigos de verdad para todo; gracias a Ángel y Paco Calvario, dos enciclopedias andantes siempre dispuestos a la colaboración y a poner al servicio de los demás su sapiencia; gracias a todos por tanto y tan bueno como habéis sembrado en mi, jamás lo olvidaré. Amigos, alegraos, saludaos unos a otros como si fuera la primera vez o como viejos amigos. Abrazaos, bailad y reíd; romped por unos días la monotonía de todo el año, de forma que la explosión de vuestra alegría no tenga más límite que el del respeto a los demás. Demos paso a la convivencia, la diversión y al sabrosísimo rapón.

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