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Navegando por el Nalón sobre un cisne

Los paseos en un hidropedal con aspecto de ave organizados por el puerto de San Esteban entusiasman a los turistas

Por la izquierda, los turistas bilbaínos Andrea, Manuel, Sara y Mateo Unceta navegan en el hidropedal con forma de cisne. S. ARIAS

La ría del Nalón tiene un nuevo habitante, un gran cisne vulgar, para sorpresa de vecinos y visitantes. Pero este cisne no tiene plumas. Se trata de un cisne mecánico, el hidropedal que se suma a la oferta turística de la desembocadura del bajo Nalón, junto a la lancha de paseo "La Carmela", en el puerto de San Esteban de Pravia (Muros de Nalón). Quienes lo han probado están encantados. "Ha sido brutal, espectacular, disfrutar de la ría así", comentó Manuel Unceta, de Bilbao.

Detrás de la idea está Juan Martínez Monasterio, a quien se le ocurrió llevar un hidropedal a San Esteban tras ver este tipo de vehículos recreativos en muchas playas y puertos de España. "Aquí, en esta zona, y creo que en Asturias en general, no hay nada de este tipo", comenta. Por el momento, el cisne ya ha dado unos cuantos paseos. El alquiler cuesta 20 euros por hora o 14 euros por treinta minutos.

El cisne tiene que navegar por una zona restringida, entre el puerto y la dársena que separa la ría en dos, para evitar que los que disfruten del hidropedal no se vean en problemas debido a las corrientes que se producen en la desembocadura. Tampoco pueden bañarse en el agua tirándose desde el cisne y siempre deberán dejar paso a las embarcaciones.

Si el cisne tiene éxito este verano, Martínez ya piensa en traer más para ampliar la oferta turística del puerto. "Quiero aumentar la oferta de actividades recreativas y creo que puede ser un aliciente", señala. Además, el año que viene prevé instalar una plataforma con motos de agua.

Junto al cisne está atracada "La Carmela", la lancha turística del concejo que ofrece paseos por la ría, hasta la zona de El Castillo (Soto del Barco), y cruza cada hora a la vecina localidad de San Juan de La Arena. La embarcación turística es más barata que el cisne, pues un paseo supone 6,5 euros y el billete de ida y vuelta entre ambas localidades tiene un coste de cuatro euros.

Todos los que han probado cualquiera de las dos formas de navegar la ría han disfrutado de las calmas aguas del puerto.

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