Desde ayer, un pedacito del Sáhara está en el concejo de Llanera. Una veintena de niños saharauis, todos ellos participantes en el programa "Vacaciones en paz", vivió una jornada de convivencia en el recinto ferial de Ables con otros tantos chicos llanerenses. Durante la jornada, que se prolongó desde las 10.00 hasta las 17.00 horas, los chavales compartieron partidillos de fútbol, juegos tradicionales asturianos y actividades relacionadas con la cultura de este pueblo norteafricano que vive una complicada situación política y humanitaria desde hace 40 años.
"Estamos jugando con globos y nos lo pasamos muy bien", aseguró Fatma Hosem, una de las niñas beneficiarias del programa "Vacaciones en paz". "Durante el verano también estoy disfrutando mucho. Fui al Palacio de los Niños, a la playa y a la piscina", explica Hosem, que a sus 11 años disfruta de su segundo verano en Asturias.
Desde el otro lado del programa, Alba Ramos, cuya familia acoge a otra de las pequeñas participantes, también celebró la organización de este tipo de actividades. "Estoy muy contenta con la niña que ha venido, y ella con nosotros. Habla un poco de español y estos días ya ha aprendido a montar en bici y a bucear", aseguró. Pese a contar sólo 11 años, Ramos es consciente de que en septiembre su compañera se irá, y su vida volverá a cambiar completamente. "Me da mucha pena que ahora pueda disfrutar de grandes comodidades y que cuando tenga que volver al Sahara se quede sin ellas", afirmó.
Aunque en esta ocasión no han acogido a ningún niño, la familia de Paula Monteiro cuenta con experiencia en el programa "Vacaciones en paz". "El año pasado tuvimos un chico, Mohamed, y todo le llamaba la atención. Desde abrir un grifo hasta bañarse en la bañera. También le gustaba mucho la comida", relató. "A la niña que está conmigo le alucina la plancha, porque saca vapor y deja la ropa caliente", añadió Ramos, también sorprendida.
Las actividades relacionadas con el pueblo africano corrieron a cargo de Fatimetou Bedri, presidenta de la Comunidad Saharaui Residente en Asturias, quien celebró esta actividad de acercamiento cultural. "Es una fiesta para los niños. Tienen juegos y actividades, y además podrán tomar té o hacerse tatuajes de henna, que es una tradición nuestra para días especiales", aseguró Bedri, quien lleva seis años residiendo en España. "Además del encuentro de hoy (por ayer), también es muy importante el programa 'Vacaciones en paz' en sí, porque permite a estos chicos salir de los campos de refugiados en una época en la que las condiciones allí son muy duras", aseguró la presidenta de la entidad, que también disfrutó de esta actividad de acogimiento "en Alemania, Libia y Argelia" cuando era niña.
El encuentro entre los participantes en el programa "Vacaciones en paz" fue puesto en marcha por el Ayuntamiento de Llanera en colaboración con el Principado. Con esta iniciativa, la intención del Consistorio es "dar mayor visibilidad al problema saharaui y tratar de potenciar el acogimiento. Lo que pretendemos es que los niños disfruten de una jornada de intercambio cultural y también dar a conocer esta iniciativa, para que cada año se sumen más familias", explicó la concejala de Cooperación, Consuelo Álvarez.
