Rubén Álvarez y David García "Lete" son dos piragüistas del club Los Gorilas de Candás que van a por todas. Quieren remar desde la villa a Bilbao y recorrer unos 240 kilómetros por mar para batir un récord Guinness. La intención de ambos deportistas es hacer esa distancia entre 25 y 30 horas, pero para ello necesitan una embarcación, una canoa polinesia, también conocida como OC2.
Por ello, en próximas semanas impulsarán una campaña de captación de fondos a través de "crowdfunding" o micromecenazgo. Álvarez y García querían haber realizado la prueba este año, sin embargo tendrán que aplazarla al año próximo dado que les fallaron las fuentes de financiación y patrocinadores con los que contaban en un principio. "Por eso decidimos recurrir al crowdfunding", explican. La idea de navegar hasta Bilbao no es solo para intentar batir el récord Guiness, sino también para "unir aún más dos antiguos puertos balleneros", el de Candás y el vizcaíno. El dinero que obtengan con la campaña de micromecenazgo servirá para financiar la embarcación y si es el caso, adquirir nuevos trajes para la prueba.
"Las empresas que nos quieran ayudar tendrán su pegatina en la embarcación como ocurre por ejemplo con Hermanos Helio y el Ayuntamiento de Carreño", destacó Rubén Álvarez. La piragua en cuestión tiene un precio de mercado que ronda los 5.000 euros.
"Iremos tu y yo contra el mundo", bromea David García a su compañero. La prueba será sin ningún tipo de descanso. Tendrán un barco de apoyo pilotado por su amigo Abel Gutiérrez, que será el encargado de trazar la travesía cantábrica que atravesará el centro y oriente de Asturias, Cantabria hasta llegar al puerto vizcaíno. "Prevemos salir en junio aunque todo depende de los apoyos que recibamos", destacan los piragüistas.
Pese a su juventud, ambos rondan los 30 años, Álvarez y García llevan toda la vida montados en canoa. "Yo empecé con siete años y tengo treinta", apostilla el segundo, que durante la prueba será el encargado de imprimir la fuerza de la embarcación. Irá colocado en la parte trasera de la piragua mientras Rubén Álvarez se encargará de dirigir la canoa y marcar el ritmo.
La campaña de "crowdfunding" se hará también con huchas que se colocarán en los comercios y negocios hosteleros de Candás. Otro de los flecos que faltan por amarrar una vez cuenten con el capital suficiente será avisar a un comisario de los premios Guiness para que cerciore que la hazaña es digan de la distinción. Los remeros candasinos ya cuentan con un premio de estas características pero en otra modalidad.
Fue el pasado otoño en aguas de Murcia cuando junto a otros dieciocho piragüistas españoles -incluidos los asturianos Mario Castro y David Fernández- remaron la mayor distancia posible en 24 horas. Hasta la fecha, ese récord estaba en manos de un grupo australiano. Entonces recorrieron 188 kilómetros oficiales por un circuito de 3.000 metros aunque el cuentakilómetros de su embarcación marcaba 210. "Pese a todo, pudimos hacer más", comentan los piragüistas, que con su próxima hazaña quieren batir otro Guiness y de paso homenajear a aquellos marineros que se dedicaban hace décadas a la caza de la ballena.
