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Los jabalíes son un riesgo constante en la autovía, avisan los cazadores maliayeses

La sociedad cinegética "El Portal" urge la revisión de la malla que cierra la Transcantábrica, que presenta agujeros por los que se cuelan los suidos

La falta de mantenimiento del cierre de la Autovía del Cantábrico (A-8) a la altura de Villaviciosa se ha convertido en un peligro para los conductores por el paso constante de jabalíes, denuncia la sociedad maliayesa de cazadores "El Portal", que advierte de que ya se han producido algunos incidentes y teme que se produzcan más y de peores consecuencias.

"Hará algo más de quince días hubo un accidente por atropello", destaca el presidente de la sociedad cinegética de Villaviciosa, Chema Pezón. Explica que están preocupados por esta situación, que llevan tiempo denunciando y que ya ocurrió el año pasado por culpa de que no se mantiene correctamente el perímetro de protección de la autovía.

Sin ir más lejos, subraya, el sábado, cuando inauguraron la temporada de caza, "varios jabalíes cruzaron por los agujeros de la malla, en la zona de Niévares, y pasaron por varios sitios". Por fortuna, todo quedó en un susto que no fue a más. Pero eso no quita que se canse de denunciar que "es un peligro y más con el tráfico que tiene esta autovía". Fue un alivio que consiguieran coger a los perros, pues no fueron detrás de los jabalíes, como es lo propio en ellos, señala. En la anterior temporada tuvieron peor suerte y se les escaparon tres canes.

Chema Pezón explica que han informado de la situación al centro de control de mantenimiento de la autovía, pero lamenta que "no se toman medidas". Hay zonas como, por ejemplo, "frente a Piñera, debajo de San Fermín, donde la valla está cortada en un tramo, por el que puede acceder cualquier animal o persona", advierte el presidente de los cazadores maliayeses.

Recuerda que siempre fue una zona de paso de jabalíes, y si no se cierra correctamente su tendencia es colarse para seguir su trayectoria, con el peligro que esto entraña para animales y viajeros. Si ya es un riesgo alto atropellar un jabalí en una carretera convencional, aún lo es más en una autovía, donde se circula a mayor velocidad. Por ello, insiste en la importancia de que se cierre correctamente el perímetro para impedir que la fauna salvaje crucen la carretera.

Años de denuncia

Los cazadores vienen denunciando la misma situación desde hace años. En octubre de 2013, en el transcurso de una cacería en Cazanes (Villaviciosa), tres perros de caza fueron atropellados al salir tras un jabalí y colarse en la autovía. Sobrevivieron milagrosamente. En 2011 la situación era similar porque empezaba a crecer el número de accidentes ocasionados por la invasión de los carriles por parte de corzos y, sobre todo, de jabalíes. El riesgo es alto para animales y viajeros.

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