El candasín Víctor Manuel Álvarez entregó el pasado jueves en la Junta General del Principado la segunda remesa de firmas para intentar suavizar la normativa que afecta a los hórreos y que ésta permita emplearlos para otros usos que no sean el de granero. "En noviembre pasado entregamos 2.124 firmas y ahora presentamos otras 1.678", expresó el impulsor de esta iniciativa que, dice, cuenta con un "gran respaldo" popular. En total, 3.182 firmas. Álvarez acudió a la Junta el pasado miércoles acompañado por Paula Berdasco. Tras presentar las rúbricas en el registro general de la administración regional, el impulsor señaló que iba a entregar una copia del listado de firmas a cada uno de los grupos con representación en la cámara autonómica -PSOE, PP, Podemos, Foro, IU y Ciudadanos- con el fin de recabar apoyos a su petición.
"Tenemos firmas no solo de asturianos, sino de todo el mundo, ya que ya hay apoyos llegados desde México, Australia, Bélgica y Venezuela, por citar algunos países", explicó Álvarez
La intención de esta campaña que quiere flexibilizar el uso de estas edificaciones de la arquitectura tradicional asturiana es que puedan ser utilizadas como vivienda o incluso como alojamientos rurales, lo que a su juicio impulsará su mantenimiento y su recuperación.
El impulsor de la campaña considera difícil de creer que haya ciudadanos que, en la actualidad, quieran construir un hórreo para utilizarlo como un granero, de ahí que pida modificar la normativa regional. Víctor Manuel Álvarez defendió desde el momento en el que comenzó a recoger las firmas que ese cambio en la ley permitiría que las personas que deseen construir un hórreo puedan hacerlo sin estar obligados a tener un terreno y una vivienda anexa, que es lo exigido actualmente por la legislación autonómica. Con la petición de Álvarez, sería necesario solo el terreno.
