Alicia Prendes y Antonio Vázquez, la pareja que fue desalojada por seguridad ante los posibles argayos del monte Fuxa, quiere volver a entrar en su vivienda tres años y medio después. "Desde hace tres años y medio no cayó una piedra más", expresa Vázquez. "Somos una familia que vamos a morir por lo nuestro", añade Prendes, que aprovechó la ocasión para solicitar al Ayuntamiento que requiera al propietario de la ladera que ejecute las obras necesarias para poder entrar de nuevo en su vivienda. Los dueños de la casa situada en el paseo marítimo se aferran a un informe redactado por la firma Avanzatech el pasado mes de abril en el que analiza el estado del talud anexo a la vivienda de la pareja desalojada: "Ahora no corre peligro la casa, ¿por qué no nos dejan entrar?".
El PP defiende también que el Ayuntamiento debe requerir al propietario que estabilice la ladera y además, señaló que existen ciertas contradicciones ya que el paseo marítimo abrió dieciséis meses después de los argayos, es decir, que "no se aprecia riesgo". "¿Si corre peligro la casa, el paseo no?", se preguntó el portavoz del PP, José Ramón Fernández.
Prendes y Vázquez defienden también que el Ayuntamiento podría ejecutar las obras necesarias en la ladera de manera subsidiaria que permitirían realojar al matrimonio. La pareja acudió ayer a la casa para sellar la ventana por la que supuestamente entraron los ladrones hace días, como denunciaron ante la Guardia Civil. "Dejaron la ventana abierta sin poner tablas ni silicona ni nada, por eso venimos ahora nosotros, para que no se vuelva a repetir lo del otro día", expresó Prendes, que quiso agradecer el trato recibido por la Guardia Civil y la Policía científica el día que comprobaron los daños. "Actuaron con profesionalidad y humildad", expresó Prendes, que añadió: "El Ayuntamiento y la Policía deben vigilar la casa, que por cierto, estaba desmantelada. Ahora nos toca esperar a ver qué dice la Policía científica".
