"A veces pienso que deberíamos formar una asociación o algo, para organizar charlas o incluso sacar una publicación anual". Antonio Martínez sonríe al calcular cuántos historiadores conoce que hayan salido de Noreña o tengan relación con la villa. Una tradición que se remonta a Juan Uría Ríu, y que en la actualidad engloba a, al menos, una veintena de profesores e investigadores.
Además de Martínez, oriundos o residentes de la localidad son historiadores como Francisco Junquera, Juan Jesús Sánchez, María Dolores Alonso Cabeza, Pelayo Suárez, Fernanda Valdés, Benjamín Gutiérrez Huerta, Daniel Blanco, José Manuel Rodríguez Hevia o la historiadora del arte Lucía Alperi, entre otros. Además, también tienen vínculos con la villa otros historiadores como Carlos González Cuesta, José Antonio Leirado o Roberto García Morís, que completó la secundaria en la localidad. Para completar el escenario, en el ámbito de las ciencias sociales destacan investigadores como Óscar Rodríguez Buznego, Javier Blanco o David Luque, que tienen vínculos afectivos con la villa e investigaciones sobre el pasado de Noreña, y estudiosos de la historia local como Miguel Ángel Fuente o José Manuel Fanjul.
"No sé la razón por la que han salido tantos. Quizás es que la población de Noreña tenía un acceso más fácil a los estudios universitarios, y hay muchos historiadores como puede haber muchos médicos", reflexiona Juan Jesús Sánchez, quien además destaca algunas figuras de referencia: Uría Ríu y su hijo, Juan Uría Maqua, pero también José Gonzalo Sancho, "Pin".