Aunque la maduración de la manzana de sidra este año llega con retraso -los quince días que arrastra de la demora de la floración-, las pumaradas ya empiezan a estar en pleno apogeo. La recogida va más lenta que otras campañas, también porque éste no es año de gran cosecha por la vecería o alternancia en la producción.
El director técnico de producción vegetal de Campoastur, Jorge García, insiste en que "no hay que apurarse a recoger porque no está maduro y parte de la calidad va ahí. Hay que saber esperar". Los expertos recalcan que es fundamental mayar en el punto óptimo de maduración, pero por las prisas de los productores o de los elaboradores no siempre se cumple, a pesar de un elemento clave para la sidra.
"Estamos empezando la campaña, pero sin prisa porque no está madura todavía, sólo lo están las variedades más tempranas como solarina, panqueirina, blanquina, ernestina y algo de raxao", explica García.
Cosecheros como el naveto José María Díaz comentan que no están recogiendo una fruta muy grande, más bien "algo pequeña", pero también hay que tener en cuenta que a algunas variedades les queda como un mes de maduración, apunta García.
En líneas generales, zonas productoras del interior como Nava tienen los pumares más cargados, pero en la costa, por ejemplo en Villaviciosa, hay menos producción, indica Díaz. En parte tiene que ver con que en el concejo maliayés el año pasado se recogió una cosecha histórica y la mayoría de las plantaciones navetas tienen cambiado el año de producción con respecto a la tendencia general de los años impares.
No obstante, "cada vez hay más fincas jóvenes cambiadas", apunta García, por lo que compensa con aquellas que en los años pares dan menos. Así que aunque en esta campaña "hay poca manzana", sí es suficiente para abastecer la demanda de la Denominación de Origen Protegida Sidra de Asturias y Sidra Seleccionada, destaca el director técnico de producción vegetal de Campoastur.
El cosechero maliayés Isaac Argüelles confirma que la naturaleza este año no ha sido especialmente espléndida en manzana con Villaviciosa. "No tengo mucho. Todavía no me puse con ello", comenta. No tiene demasiada prisa en empezar a recoger porque sus árboles han dado poco y su maduración está retrasada. Pero las expectativas son buenas. Asegura que "se ve bien".
Las hermanas maliayesas María Dolores y María del Carmen Álvarez conocen bien lo que cuesta pañar (recoger) manzana. Estos días se han encargado de realizar esta tediosa tarea en su finca de La Alegría, en Tornón. Sus pumares son una de las excepciones en Villaviciosa porque "¡jamás en la vida hubo tanta!", resalta María Dolores Álvarez. En total, sacaron unos 1.800 kilos de su pumarada. Confirman que la fruta viene algo "atrasada" y aún está "un poco verde", pero "está buena y sana".
Hasta diciembre la actividad será frenética en las pumaradas de la Comarca de la Sidra, aunque este año es una campaña más tranquila porque hay que esperar a que la fruta madure y porque los árboles están poco cargados.
