El PSOE de Noreña acusa al gobierno local, formado por IPÑ y Foro, de impedir llevar a debate en el Pleno una moción de los socialistas en la que se propone reducir el tipo del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de naturaleza urbana desde el 0,578 actual a un 0,52 para amortiguar las subidas producidas por una reciente revisión catastral.

El portavoz socialista, Unai Díaz, lamenta especialmente el voto negativo de la alcaldesa, la independiente Amparo Antuña, a que este tema fuese tratado en el máximo órgano de decisión municipal. "Con esta decisión se está incumpliendo el compromiso de que todas las propuestas de los grupos serían abordadas en los Plenos", declara Díaz, que ve en estas medidas un paso atrás en "la transparencia que se prometió a comienzo de mandato".

Sobre los motivos que llevaron al gobierno a evitar el debate de la moción, Díaz recuerda que se les argumentó que se trata de una propuesta "extemporánea", pues los plazos harían inviable aplicar la reducción del impuesto de cara al 2017. No obstante, cree que de existir voluntad de debate, este se hubiese producido. "Si no hay tiempo de aplicarlo para el 2017 se puede debatir si se aplica para el año siguiente", declara Díaz, que, de todos modos, recuerda que su grupo planteó fórmulas para acortar plazos de cara a facilitar la aplicación de la reducción para el próximo año. "Dimos la posibilidad de celebrar un Pleno extraordinario renunciando a las dietas, pero no lo tuvieron en cuenta", sostiene el portavoz.

Sobre los motivos de una propuesta que llega ahora que los socialistas están en la oposición, Díaz apunta a una clara demanda vecinal. "Es cierto que la revisión catastral se hizo por petición de nuestro gobierno, pero es ahora cuando los vecinos aprecian una subida en el recibo que queremos aliviar", explica sobre una bajada de tipo que reduciría los recibos en el 10% de incremento reflejado y que cree que debería valorarse.