Ya es posible embotellar -y que aguante sin fermentar- sidra del duernu. Lo han conseguido en San Román de Sariego, en el llagar Foncueva. Es un zumo de manzana fresco sin pasteurizar, "lo más parecido a la sidra dulce", explica Cele Foncueva. Llevaban unos cuatro años dándole vueltas porque el mosto recién mayado tiene mucho éxito y gusta, pero no se puede comercializar así, tal cual, y además, es una bebida con una caducidad muy rápida porque en dos o tres días empieza a fermentar. Eso sí, se guarda el secreto de cómo evita la fermentación.
"El secreto es que es un zumo fresco, sin colorantes, conservantes ni azúcares añadidos", destaca Foncueva. Además, como no ha sido pasteurizada, esta bebida "conserva las propiedades de la fruta fresca". Tiene una vida de tres meses, porque se ha conseguido estabilizar el zumo, y se ha de conservar en la nevera. "Es idéntico a la sidra dulce y es el primer zumo de manzana sin pasteurizar en Asturias", resalta Cele Foncueva.
Además, no tiene alcohol, al no haber fermentado, y sus únicos azúcares son los de la fructosa, no son añadidos. Contiene 13,5 gramos en cada envase de 250 mililitros, que es en el que se comercializa desde hace unos días en algunos supermercados, tiendas gourmet y en establecimientos de hostelería. Este llagarero también destaca que contiene "100% fruta", pues es el mismo zumo que se utiliza para la elaboración de sidra natural, con la única diferencia de que no está fermentado. Se elabora con manzana asturiana, aunque "no descartamos trabajar con manzana de fuera para estar todo el año en el mercado", pues ahora mismo es un producto de temporada. Lo que significa que sólo se vende coincidiendo, más o menos, con la época de mayado, de octubre a febrero.
Cele Foncueva explica que "la idea es maridar con más frutas". La previsión es lanzar el año que viene este zumo de manzana con frutos rojos y otro de manzana con kiwi. Comenta que Zen (Zumo Exclusivo Natural) encandila a quien lo prueba y la sorpresa es que es como beber sidra del duernu, pero tiene la grandísima ventaja de que se puede consumir sin prisa y sin los apuros de evitar que fermente y teniendo que dejar el tapón de la botella abierto para que no reviente por la actividad de las levaduras durante la fermentación. El llagarero de Sariego lo tiene claro: "Éste es el mejor zumo de manzana del mundo. No te pedimos que nos creas, sólo que lo pruebes para demostrártelo". Y quien lo toma se convence.
En su afán por innovar, esta bodega lanzó hace unos meses otro producto, Swin, una sidra achampanada en lata, partiendo de sidra natural. Todo es poco para innovar y traspasar fronteras en un mundo tan tradicional como es el sector sidrero.
