El concejal de Seguridad y Festejos del Ayuntamiento de Siero, César Díaz, abrió ayer la puerta a la posibilidad de ubicar en la plaza cubierta de Pola de Siero los museos de los Güevos Pintos, los sifones y el ferrocarril con el objetivo de dar un mayor aprovechamiento al equipamiento a lo largo del año. La propuesta salió a la luz dentro del debate de una moción de Izquierda Unida para abrir la instalación a los vecinos durante todo el año y crear un parque de invierno sin perjudicar la actividad actual. Una iniciativa que salió adelante pese a la abstención de PP, Somos, PVF y Pinsi, y que dejó en evidencia la coincidencia de todos los grupos en que el edificio está infravalorado, pero las diferencias a la hora de aportar alternativas concretas.

El propio César Díaz puso en duda la propuesta realizada por IU, al considerar que conllevaría un importante gasto corriente. "Sólo con un conserje y una persona para limpiar, los gastos superarían ya los 3.000 euros mensuales", advirtió el edil, mientras que el alcalde lamentó que las demandas vecinales de abrir la plaza a paseantes no vinieran acompañadas de colaboración. "Sondeé la posibilidad de que los vecinos se encargaran de abrir la plaza a diario y me preguntaron cuánto pagaba", señaló el socialista Ángel García, justo después de que Somos instase a "implicar a la ciudadanía y escuchar a los colectivos" para buscar una fórmula de gestión.

Por su parte, la portavoz popular, Beatriz Polledo, defendió una utilización fundamentada en una mayor programación de ferias y eventos y rechazó "una apertura diaria", mientras que Foro optó por respaldar la propuesta, que llevaba en su programa electoral, y Ciudadanos también mostró sus dudas de la propuesta por los gastos que generaría. No obstante, los grupos se comprometieron a debatir en futuras comisiones acerca de una fórmula que permita dar vida a la plaza sin que ello conlleve un importante incremento del gasto público.

Otro de los puntos que generó gran debate fue la propuesta del gobierno de aportar 72.000 euros al plan de pensiones municipal en compensación por los cuatro años de paralización del fondo social que denunciaron la pasada semana trabajadores y sindicatos. Estos reclamaban la incorporación de 216.000 euros a dicho plan, pero el gobierno asegura que esa pretensión no se ajusta a la legalidad. "Establecimos el máximo que permite la ley para aportaciones de los años 2014, 2015 y 2016", señaló la concejal de Personal, Aurora Cienfuegos, cuya iniciativa fue respaldada por Foro Asturias, PVF y La Fresneda, mientras que el resto de grupos optaron por la abstención aduciendo varios motivos como las dudas sobre el proceder pese a los informes técnicos favorables o el hecho de que las aportaciones no fueran más justas.

Entre las propuestas en las que hubo un acuerdo amplio se encontraron la aprobación de los últimos trámites municipales para la construcción de las nuevas viviendas de Pumarabule, el nuevo reglamento de prestaciones sociales o una moción del PP en la que se insta a acometer estudios y tomar medidas para lograr una mayor eficiencia energética e iluminación en el concejo. Aspecto sobre el que el exalcalde y portavoz de Foro, Eduardo Martínez recordó que se logró un ahorro de 500.000 euros anuales en tan sólo tres años.