Noreña ha reeditado el buen entendimiento entre el gobierno conservador y una parte de la izquierda local para sacar adelante el presupuesto. IPÑ y Foro, en el ejecutivo, podrán desarrollar sus cuentas gracias al apoyo de los dos concejales de Conceyu Abiertu, que les garantizan la mayoría absoluta para en un pleno que tendrá lugar a mediados de la próxima semana. Un respaldo que la agrupación de electores argumenta en su apuesta por "hacer oposición constructiva" y "avanzar hacia una Noreña mejor".

Además de la inclusión del IBI social que Conceyu Abiertu había establecido como primordial para iniciar las negociaciones, sus representantes destacan el hecho de que se aceptase aumentar las subvenciones a colectivos en un 10%, destinar una partida para reparaciones subsidiarias de patrimonio, así como consolidar otras partidas ya incluidas en el pacto para 2016.

Unos acuerdos que no modifican la cuantía de un presupuesto que será de 4,02 millones de euros como se establecía en el borrador ni trastocan de manera importante las partidas. "Las partidas apenas han bailado en unos miles de euros", destacó el concejal de Hacienda, Inaciu Iglesias, que también resta importancia al hecho de que la aprobación se realice con el año empezado. "A efectos prácticos la diferencia con el año pasado es inapreciable", indica.

Mucho más críticos se muestran en el resto de los partidos de la oposición (PSOE, IU y PP) que rechazan los presupuestos tras no incluirse sus demandas en una negociación que tildan de "paripé" y consideran que lleva semanas cerrada. "El día 16 de diciembre ya había acuerdo y la única reunión con nosotros tuvo lugar el día 20", denuncia el portavoz de IU, René Coviella.

Por su parte, los socialistas lamentan que no se incluyese ninguno de los proyectos que planteaban y se oponen a apoyar unas cuentas que a su juicio aumentan la presión fiscal. "En tres años los ingresos por impuestos directos aumentaron un 6% y, por contra, la partida de bienes y servicios cayó en un 3%", indicó la edil Verónica Noval, instando al gobierno a explicar "en qué recortan".

Sin embargo, el momento más tenso de la comisión fue el debate de los reglamentos de participación ciudadana planteados por Conceyu e IU, que fueron incluidos por sorpresa en un segundo punto. Un gesto que a portavoz del PP consideró una parte más de la negociación y que le llevó a abandonar la sesión como protesta ante el hecho de que la propuesta de Conceyu, que salió adelante, fuese acompañada por un informe técnico, mientras que la de IU, que fue retirada, carecía del mismo.