La asociación de vecinos de Candás criticó ayer la nueva rampa de acceso colocada a la entrada del Museo Antón, en la fotografía. El presidente del colectivo, Luis Fernández, considera que la obra realizada no cumple con los objetivos de la ley de accesibilidad, sobre todo, por la parte más próxima a la Casa Consistorial. "Es un obstáculo colocado en mitad de la acera, que puede hacer por uno de los lados que los peatones tropiecen y por lo tanto no es accesible", indicó Fernández, que pidió señalizar el entorno o bien la colocación de una barandilla.