Un miembro de la junta local del PP de Noreña presentó recientemente, a título individual pero a propuesta del partido por una cuestión de plazos, un recurso a la ordenanza sobre el uso del asturiano, aprobada en el municipio el pasado mes de abril con los únicos votos en contra de los populares y el PSOE.

La portavoz del PP local, Marian Velasco, sostiene que su partido seguirá apoyando el uso y protección del asturiano como ya hizo en el gobierno regional con el impulso de una ley al respecto en el año 1998, pero considera que la ordenanza "contiene defectos de tramitación y rebasa en su articulado los límites legales".

Velasco señala que, además de carecer de un estudio económico que la respalde, la ordenanza establece "una clara discriminación en el ámbito de los méritos", y pone como ejemplo el hecho de que incluye el conocimiento o no del bable como aspecto a puntuar en las convocatorias de empleo público.

Por otro lado, denuncia que la aprobación del texto "está claramente destinada a satisfacer favores políticos" por parte del gobierno de IPÑ y Foro a Conceyu Abiertu, y advierte que "supone más gasto, burocracia y obligaciones para el Consistorio y sus empleados", lo que considera que "no va en la línea de gestión municipal que plantea el PP".

Este recurso planteado por la vía de lo contencioso administrativo pilló por sorpresa tanto al equipo de gobierno como al resto de grupos que respaldan su entrada en vigor, pues si bien en junio del pasado año Delegación de Gobierno pidió su anulación, meses después descartó recurrir la norma tras mantener reuniones con miembros de este órgano gubernamental. Decisión sobre la cual se desmarca el PP de Noreña, que asegura tener el total respaldo de la dirección regional y avisa que no va a "consentir presiones ni amenazas veladas por parte del equipo de gobierno".