"El Ayuntamiento debería estudiar el proyecto de cámaras de videovigilancia en Lugo y Posada". El portavoz del Partido Popular, Silverio Argüelles, instó ayer al gobierno local a poner en marcha esta medida, impulsada por los populares durante su último año de mandato. De hecho, el Consistorio llegó a firmar un contrato con una empresa para la instalación de cámaras en Lugo, que se encontraba instalando los postes para los dispositivos cuando el tripartito, a las pocas semanas de obtener el bastón de mando, decidió resolver el contrato alegando "que las cámaras no ofrecían imágenes de alta definición".

"Izquierda Unida siempre se negó a la instalación de las cámaras, y éste es el verdadero motivo por el que pararon el proyecto. Las cámaras ofrecen una nitidez suficiente como para tratar de evitar y esclarecer robos. No soy un experto en estos dispositivos, pero sí tuve acceso a pruebas y se puede ver perfectamente una matrícula a 100 metros de distancia", aseguró el portavoz de los populares.

Esta denuncia viene fundada por los numerosos robos sufridos en viviendas y establecimientos de Posada, así como actos vandálicos en Lugo durante los últimos meses. "Decidimos llevar adelante esta propuesta tras hablar con las fuerzas de seguridad y los empresarios. Todos estaban de acuerdo porque, de aquella, había una oleada de robos. Ahora el tripartito no ha hecho nada. Dijeron que iban a poner cámaras, pero en tres presupuestos no se ha programado ninguna partida para ello", señaló el edil.