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La rehabilitación de la iglesia de Peñaflor, en Grado, comienza por el tejado

El Principado concedió una subvención de 17.000 euros que, junto con las donaciones, ha permitido el inicio de la obra en el templo románico del siglo XIII

José Manuel González, vicepresidente de la Asociación de Vecinos de Peñaflor (Grado), delante del cabildo de la iglesia, en plena reforma. S. ARIAS

A por lo más urgente, con celeridad y eficiencia. Así han comenzado los trabajos de rehabilitación de la iglesia románica de San Juan de Peñaflor (Grado), del siglo XIII, y uno de los elementos patrimoniales del Camino Primitivo a su paso por el concejo moscón. La reforma ha sido impulsada por los vecinos de la parroquia, tras seis años con el templo cerrado. Han conseguido fondos y una subvención del Principado de Asturias, concedida al Arzobispado de Oviedo, con un montante de 17.000 euros, que ha permitido iniciar el proyecto.

"Estamos muy contentos porque con el inicio de la obra garantizamos que la iglesia no se vaya al traste", afirma José Manuel González, vicepresidente de la asociación vecinal de Peñaflor. Y no es para menos, pues los trabajos comenzaron con buen ritmo y los albañiles ya han eliminado las goteras de la nave central y han repuesto por completo el tejado de la capilla. Han tenido que sustituir algunas vigas en mal estado antes de rematar la cubierta con teja. "Hay que ir poco a poco, pero lo que más peligraba era el altar", indica. Además, retiraron el sabugo (saúco) y el arce que crecían en el tejado.

El proyecto integral que encargaron los vecinos prevé una inversión total de 200.000 euros. Si bien por el momento no han conseguido sumar la cantidad, sí han tomado la decisión de iniciar los trabajos para ejecutar la primera fase con los fondos recaudados y la ayuda autonómica. La cuenta para recibir donativos sigue abierta en la oficina de Liberbank de la villa moscona.

Además de la mejora de la cubierta del inmueble, que fue reedificado en los siglos XVIII y XIX, están dando lustre al cabildo. Han retirado la infraestructura de madera contigua a la nave central para rehacerla con madera de castaño. "Tenía partes con madera de pino, que pudre en seguida; el castaño dura mucho más", detalla González.

Por el momento, el tejado y el cabildo son las actuaciones que han podido acometer, pero los vecinos de Peñaflor no olvidan su principal objetivo: la rehabilitación integral del inmueble.

Además de poder volver a asistir a misa en el pueblo, el vecindario destaca que tener la iglesia de San Juan en condiciones servirá para sorprender gratamente a los peregrinos del Camino de Santiago, quienes encuentran el templo en su llegada al municipio.

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