El gobierno local de Siero escuchó las peticiones vecinales sobre la necesidad de instalar semáforos en la carretera que une Pola de Siero con Ferrera, desde la Autovía Minera (AS-I), y ya son una realidad. Ayer empezaron a funcionar. La obra costó 35.681,94 euros. Los semáforos disponen de iluminación propia que se activa, de noche, al pulsar el botón de peatón.

El proyecto incluyó un paso de peatones con semáforos, así como sendos semáforos de preaviso en sentido a Ferrera (oeste) y en sentido Pola de Siero (este), a 115 y 160 metros, respectivamente. Además, con el objetivo de encauzar y favorecer la seguridad de los viandantes que circulan por la zona, se ejecutó un tramo de acera de hormigón pulido con un ancho aproximado de 1,80 metros y unos 14 metros de longitud al norte, hacia Celles. En el borde sur, se acometió una acera de hormigón pulido de unos 1,50 metros de ancho y unos 30 metros de longitud en paralelo a la carretera.

El alcalde de Siero, Ángel García, y el concejal de Infraestructuras, Servicios y Medio Ambiente, Javier Rodríguez -que asistieron a la inauguración de los semáforos junto a otros miembros de la corporación municipal-, destacaron el "elevado volumen de tráfico" de esta carretera, que, aunque tiene limitación de velocidad, "resulta difícil para los peatones cruzarla en la zona que une los núcleos de Forfontía con Celles". Además, esta zona entre ambas poblaciones es muy frecuentada por viandantes y la situación se complicaba al no haber paso de cebra en el entorno de Celles ni pasos elevados que faciliten el cruce, con el consiguiente riesgo de atropello a la hora de cruzar la vía. De ahí que estos semáforos fueran muy demandandos por los vecinos.