El viento que se llevó volando las carpas de la feria Arte Gijón 2015 va camino de quedarse en nada en comparación con el huracán de indignación que sienten a día de hoy algunos de los artesanos afectados por aquel desastre. Una indignación que procede de los 200 euros de indemnización por los daños sufridos que ayer ofreció la aseguradora a los vendedores con los que no ha habido acuerdo, en concreto dos joyeros de Oles (Villaviciosa) y de Salinas.