La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Las sidrerías de la Pola acuerdan subir 20 céntimos la botella a partir de hoy

"Llevamos años sin aumentar los precios", destacan los hosteleros, cuyos clientes aceptan pagar 2,70 euros por lo trabajoso de servir la bebida

Por la izquierda, Fernado Suárez, Paco Rodríguez, José Manuel Rodríguez, Jesús Martínez y Enrique Meoro, ayer, en Les Campes, tomando unos culetes escanciados por Lisandro Morillo. MARIOLA MENÉNDEZ

Las sidrerías de Pola de Siero se han puesto de acuerdo para subir, a partir de hoy, 0,20 euros la botella de sidra. Pasa de costar 2,50 euros a 2,70. Se suman así a una tendencia que han seguido en otros concejos cercanos, como Villaviciosa y Nava. Pero la diferencia es que aquí han logrado el consenso, que con frecuencia escasea en el sector.

Los chigreros llevan años diciendo que es necesario subir el precio porque es una bebida demasiado barata para la calidad y el trabajo que conlleva servirla, no sólo por el escanciado, sino también por los cuidados que precisa. Pero casi siempre falta la unión. En este caso sí la ha habido en la Pola. Lo confirma cristina Ordiales, presidenta de la Asociación de Hosteleros de Les Campes. "Llevamos años sin subir la sidra", argumenta. "El año pasado los lagareros ya nos la subieron y nosotros no la subimos", esgrime Rosana García, de la sidrería Manolo Jalín.

Los clientes se lo han tomado bien porque entienden las razones. Sólo hay que tener en cuenta que la botella de vino más barata que vende Rosana García en su negocio le cuesta al cliente 5,4 euros y una copa de vino, un Rioja o Albariño, vale dos euros. "Y un vino, lo sirves y se acabó, la sidra lleva más trabajo", argumenta, pues hay que estar pendiente de los clientes para echarla.

Entre quienes ayer tomaban unos culetes en su negocio estaba Fernando Suárez. "Lo veo bien porque está una persona escanciando y tiene un trabajo y un coste", explica. Además, reconoce que "la sidra es la bebida más barata que hay", pues "sólo un cubalibre ya te cuesta entre cuatro y cinco euros, y una copa de vino, dos". También aprecia que "no es lo mismo escanciar que dejarlo ahí". Compartía mesa con Paco Rodríguez. Éste opina que "si son 0,20 euros lo que lo suben, lo veo normal porque da mucho más trabajo que una cerveza o un cubalibre". Junto a ellos, Enrique Meoro daba su opinión: "veo que es una subida normal, y más ahora que no hay sidra mala, que es toda sidra de calidad, y por el trabajo que se genera". Eso sí, como clientes defienden el servicio del escanciado. "Es que con una cerveza, muchas veces, no dan ni el vaso", comenta Meoro con respecto a lo laborioso que es servir la sidra como merece.

En la misma línea se manifiesta José Manuel Rodríguez "Caravana": "en la sidrería tienen que tener un local para guardar y cuidar la sidra, y eso cuesta dinero". Admite que es una "bebida barata". Jesús Martínez ve "estupenda" la subida de precio porque "es nuestra bebida autóctona, que es delicada y hay que cuidarla".

Toni Fernández, vocal del Club Sierense Amigos de la Manzana, afirma que "si es sidra de calidad está bien" y lanza otra demanda frecuente de los cosecheros, de la mano del debate sobre el precio de la sidra: "esto tiene que suponer que suba el precio de la manzana". Destaca el aumento de la calidad de la bebida.

Compartir el artículo

stats