La Coordinadora Ecologista de Asturias ha presentado alegaciones a los trámites de consultas ambientales del proyecto de implantación de una subestación eléctrica en Santa María de Grado, donde ya hay funcionando una planta de 400 kilovatios. El colectivo entiende que los daños por los campos electromagnéticos de baja frecuencia afectan a los vecinos "por lo que carece de sentido someterlos a una más", señala Fructuoso Pontigo, presidente de la coordinadora. Alegarán contra la distancia a la que se encuentra la subestación de las localidades de Santa María, Barredo y Llera, informa S. A.