"La cancha era una olla a presión". El pabellón nuevo de la Pola vibró este fin de semana como nunca lo había hecho hasta el momento. ¿La culpa? De las chicas del Siero Deportivo Balonmano que, con su juego y "gracias al empuje de la grada", lograron superar la fase de ascenso a División de Honor de Plata en virtud de sus tres victorias. Ahora, las chicas dirigidas por Pablo Juan González esperan lograr los apoyos necesarios para competir el año que viene en el segundo peldaño del balonmano femenino nacional.
"El factor cancha fue determinante. Si no hubiésemos jugado en casa no lo habríamos logrado". Paula Solís, capitana del equipo, lo tiene claro. Y seguro que razón no le falta.
En el último partido de la eliminatoria, que enfrentó a las sierenses con el Carabanchel, las locales perdían de siete goles a falta de 20 minutos. Parecía que el objetivo se escapaba entre los dedos de las jugadoras hasta que los cambios introducidos por el entrenador y el despertar de la grada hicieron cambiar el sino del partido.
"Fue increíble. Es que la gente no paraba de animar y, claro, las chicas se vinieron arriba y lograron remontar. No sólo eso, sino que ganaron de tres. Fue muy emocionante", recuerda el presidente de la entidad, Alfonso García, quien espera que el club pueda recabar los apoyos económicos necesarios para competir en la categoría. Una tarea complicada que afronta "con optimismo". "Parece ser que Ayuntamiento y entes regionales nos apoyarán", adelanta.
En esta línea, el alcalde de Siero, Ángel García, se comprometió ayer a hacer "un esfuerzo económico" para ayudar al club a competir en su nueva categoría. El resto de partidos de la Corporación han secundado el apoyo.
