La niña polesa Delia Queipo Martínez, de cinco años, ha sido la ganadora del VI Concurso de Vídeos Músicaeduca, en la categoría de alumnos. La grabación de su interpretación del "Himno de la Alegría" en el teclado, con la ayuda de su familia, fue la que más apoyos sumó del público (256 votos por internet) y del jurado (22), que en total le reportaron los 34 puntos con los que triunfó en este certamen nacional.
"Está muy contenta", comenta su madre, Loli Martínez, que reconoce que es "un aliciente para seguir", aunque "lo más importante es que lo pasó muy bien haciéndolo". Sus padres también están encantados con el éxito de la actuación. La niña sólo tiene 5 años y lleva desde septiembre tocando el piano, lo que no ha sido impedimento para que ya interprete con soltura el "Himno de la Alegría". Su madre atribuye sus progresos en la música al método Músicaeduca que utilizan en su academia Factoría Musical, en Oviedo.
Marta Baginska es su profesora. Explica que la clave del éxito de este sistema está en la implicación de las familias y que los niños aprenden de forma amena. Desde que se creó esta escuela hace tres años han vecino participando en cada edición de estos premios. El año pasado presentaron un vídeo grupal, que fue el más visto y "fue un premio para la escuela". Este año, además, también participó otra alumna del centro, Julia Casal, que quedó séptima en su categoría.
Para Baginska, este buen aprendizaje de los alumnos, desde bien pequeños, "sólo se logra con estrecho contacto con la familia". Estima que el 95% sacan jugo a la música por la implicación que ponen los padres en este aprendizaje.
Enseñanza integral
Abogan por una enseñanza integral de la música porque también cantan y bailan. Además, abordan distintos géneros "para que sea lo más variado posible". Recomienda tocar entre diez y quince minutos cada dos o tres días para repasar las enseñanzas recibidas en clase. Aunque éste sea un método muy adaptado a los niños pequeños, desde los 10 meses, no descuida la enseñanza tradicional de la música. "Con 5 años ya empiezan a tocar, solfear y leer notas", insiste Marta Baginska. Además, aboga por "aprender de una forma divertida", lo que supone organizar "varias actividades en clase". Ofrecen aprender a tocar el teclado, violín o guitarra y lo hacen con música de fondo para que se den cuenta de los errores.
