Llegó a Asturias para seis meses y ya lleva 21 años. Asegura haberse instalado a Llanera "por casualidad", pero desde su despacho en la Universidad de Oviedo, donde ostenta la cátedra de Física Aplicada, asegura sentirse uno más del concejo desde su mudanza a Ables, hace 17 años. Por su cercanía con el vecindario, su integración y participación en la comunidad, y su importante producción científica, Pedro Gorría (Tolosa, Guipuzcoa, 1967) pregonará la fiesta de Los Exconxuraos el próximo 30 de junio, un festejo del que tanto él como su familia, asegura, son "asiduos".
- Sólo lleva diecisiete años en el concejo y ya le han elegido para ser el pregonero de su fiesta más multitudinaria. ¿Cómo lo ha conseguido?
-Esa pregunta me la llevo haciendo yo una semana, desde que me llamó el Alcalde para comunicármelo. Casi me caigo, porque no me lo esperaba en absoluto. Llegué a Asturias para trabajar en la Universidad, y a Llanera para buscar un lugar de residencia tranquilo, un poco apartado de la ciudad. Acabé en el concejo de Llanera como podía haberlo hecho en el de Gijón.
- ¿Le costó integrarse en el municipio?
-Desde que llegamos nos sentimos muy integrados con los vecinos de Ables. Además, al poco de llegar nos involucramos en la refundación de la asociación de vecinos, y eso hace que la gente te conozca y te integre. Aún así, el nombramiento como pregonero es algo que no me esperaba, pero que me llena de orgullo y me hace sentirme no sólo integrado, sino apreciado y querido por la ciudadanía; y, para mí, eso es lo máximo.
- Reside en Ables y los Exconxuraos se celebran en el recinto ferial de la misma localidad. ¿Es usted asiduo a los festejos?
-Es que yo salgo al balcón y tengo Los Exconxuraos en casa. Vivo a 500 metros del ferial y solemos ir andando a la fiesta.
- ¿Disfruta más de la actividad diurna o de la nocturna?
-Los Exconxuraos es una fiesta que se presta a disfrutarla en familia y con familias amigas. Los hijos tienen amigos del colegio o instituto y, al final, tú haces amistad con algunas de sus familias, y aprovechas para pasar unos días muy a gusto. Los mayores, con la parte de mayores, y los pequeños, con la de los pequeños. Es una fiesta que está muy bien, no sólo por las diferentes actuaciones, sino por otros actos como, por ejemplo, el mercado medieval, que me parece maravilloso.
- ¿Es usted de Rebelión, Excomunión o Perdón?
-Si atendemos sólo al día en que se celebran, diría que de Excomunión, porque es el sábado y suele ser el día que más aprovechamos; si nos referimos al significado en sí de la palabra... depende del momento. En ocasiones sería Rebelión, otras Excomunión... Pero es un tema que debería pensar más.
- Este año los actos de Exconxuraos se ampliarán al miércoles y al jueves, siendo usted, además de pregonero, el encargado de abrir las actividades con una conferencia.
-Fue un tema que surgió cuando me entrevisté con la concejala de Festejos. Se interesó por mi faceta como divulgador y me lanzó un guante sobre la posibilidad de organizar una charla en los días previos a los Exconxuraos.
- El título es "Cómo los materiales mejoran nuestra vida". ¿Tendrá relación con lo que se viene unos días después?
-Va a ser una charla en la que intentaré poner en valor la importancia que tienen los materiales, pero no sólo los nuevos. Haré un repaso desde el principio de los tiempos hasta el presente, haciendo algún guiño a la época de Los Exconxuraos, de cómo estaba la ciencia en ese momento, a principios del siglo XV. La intención es trasladar a la sociedad el interés por la investigación científica, que considero que es algo que debemos impulsar quienes estamos en la universidad.
- ¿Qué diagnóstico hace de la investigación en el país?
-Los políticos se encargan de decirnos que ya hemos dejado la crisis atrás, pero será desde su punto de vista. En el ámbito de la investigación esto está lejos de la realidad: seguimos sumidos en una crisis bastante profunda, y es un problema que vamos a pagar. Quizás no ahora, pero sí en el futuro. Si perdemos una generación de investigadores, como parece que sucederá, las consecuencias serán graves. Es importante que la gente entienda lo importante de la formación y la investigación. Sólo hay que ver que los países que mueven el mundo son aquellos que más porcentaje de su PIB invierten en investigación.
- ¿Es tanta la diferencia con los tiempos de bonanza?
-España despegó en este sentido en los años ochenta. Se crearon instituciones y se invirtió en formar investigadores. Este trabajo dio sus frutos, y la década pasada estábamos posicionados en un nivel de producción científica similar al de los países de Europa. Además, si hacemos una valoración de los resultados científicos, y valoramos euro a euro la inversión, estamos muy por encima de Francia y deAlemania.
- En Llanera está asentado el Parque Tecnológico, ¿qué valoración hace de este proyecto?
-Es importante que haya este tipo de agrupaciones de empresas que generen valor añadido, que se dediquen realmente al I+D+i. Pero esas compañías necesitan ayudas, no sólo subvenciones a fondo perdido, ni ayudas en forma de crédito. Nos falta fijarnos en lo que hacen los países de nuestro entorno, en qué protocolos habilitan para que compañías, universidad y centros de investigación estén conectados con un beneficio para todos.
