Una tortilla española con patatas de la huerta y huevos de las gallinas criadas en casa es uno de esos pequeños grandes manjares. Pero una buena patata no sólo es bien apreciada en la tortilla, también lo es en otros platos como una ensaladilla o para prepararlas fritas, que siempre triunfan. Por eso, junto a los tomates y la lechuga, es uno de los productos más demandados estos meses en el mercado de los martes en Pola de Siero.

"Este es un buen año de patata", apunta la villaviciosina de Bedriñana Luisa Fernández. Explica que este cultivo requiere "que venga buen tiempo" y también "que llueva, para nacer".

Las variedades más apreciadas son la spunta y la monalisa. Agrega que "para cocer tiene que ser más durina, y para freír, tiernina". Es un cultivo que se da bien en Asturias y, principalmente, requiere sallar (quitar las malas hierbas) un par de veces y "que no se pierdan" por culpa del mal tiempo, comenta esta agricultora de Villaviciosa que los martes vende en la Pola. Indica que en enero es cuando se empiezan a cultivar las patatas más tempranas y la siembra se prolonga hasta junio. Las primeras ya están para recoger sobre abril y las más tardías suelen estar listas en este tiempo.

Luisa Fernández vende el kilo de esta patata nueva de su huerta a un euro, aunque también las hay algo más caras. Es uno de los productos que más vende en su puesto, en el que no faltan calabacines, judías verdes y amarillas, cebolla, limones, calabazas, nueves o plantas diversas para el cultivo.