Cabranes tiene su propio traje tradicional, cuyo corte lo distingue del resto de los que se conocen en Asturias. La estudiosa de las tradiciones locales María José Hevia ha rescatado el modelo que llevaban las mujeres el día de la fiesta del concejo para llevar el ramo, que está documentado fotográficamente desde cerca de 1910, y que supone que tendrá muchos más años de tradición.
Varias piezas originales de este traje, rescatadas de familias cabranesas, se exhiben actualmente en el Museo de la Escuela Rural del municipio, situado en la localidad de Viñón. El traje fue el tema elegido este año para el programa "Alcordanza", que se realiza desde hace cuatro años en la Biblioteca del Ayuntamiento de Cabranes, encabezada por Loli Fabián Llavona.
"Alcordanza" trata de recuperar tradiciones con exposiciones y charlas, y este año la charla le correspondió, precisamente, a María José Hevia con el traje de Cabranes.
El largo de la saya y el jubón característicos de esta vestimenta autóctona se fueron perdiendo, pero en Torazo perduraron por mucho tiempo elementos originales como dengues y mandiles, combinados con elementos más modernos. Lo característico del traje es el jubón de mangas, dengue con un corte en forma de pico en el escote y puntilla, saya negra, mandil, pañuelo en seda de color, dengue y mandil con abalorios.
El traje es el que llevaban las mujeres del concejo el día de la fiesta para llevar el ramu. Se llevaba en todas las localidades, pero fue en Torazo donde más perduraron los elementos originales, debido a que la tradición del ramu por El Carmen se mantuvo viva y con mucha participación durante más años.
Y ahora pretenden que la fiesta de El Carmen de Torazo sea, precisamente, un referente en la recuperación del traje de Cabranes. "Este año ya hubo un traje tradicional de Cabranes en un ramu de La Cotariella, y el año que viene se tratará de conseguir que las cuatro mujeres de un ramo vistan como sus antepasadas", explicó María José Hevia.
Para conseguirlo, se pondrá en marcha un taller de diseño de estos trajes en el que podrán participar los vecinos del municipio.
Las promotoras de la recuperación del traje notaron cierta reticencia entre algunos cabraneses por el hecho de que sea de color negro, pero María José Hevia sostiene que, lejos de ser fúnebre, el traje negro es "símbolo de elegancia, el color negro es de alfombra roja". Su idea es que esta elegancia se extienda cada vez más en el concejo.
