La carretera N-634, una de las que más siniestros acumula en los últimos años en la región, está siendo sometida estos días a unos trabajos de reparación y mejora del firme a la altura de Carancos, en el concejo de Nava. Las obras obligan a cortar intermitente uno de los dos carriles al tráfico. Los alcaldes de Nava, Piloña y Parres llevan meses reclamando a Demarcación de Carreteras que se ejecuten mejoras integrales que permitan aumentar la seguridad del vial. La carretera, muy transitada, conecta los concejos del interior del Oriente con la zona centro de la región, informa C. CORTE.