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Robert Brufau en la Pola

El Paraguas de la estación de autobuses de la Pola antes del inicio de las obras de rehabilitación.

Decía Picasso: "Si la inspiración viene, me coja trabajando", y otro tanto digo yo cuando me pongo a contaros la alegría que siento al ver el Paraguas de la estación de autobuses en obras para su rehabilitación integral. Y es tal mi satisfacción que temo que se altere el orden del relato, pues he de confesaros que no es la primera vez que hablo de lo que no pensaba, y lo que tenía previsto lo omito. Son los misterios de la escritura.

Sea lo que sea, salga lo que salga, de todos es sabido que muchos de los logros y avances humanos son fruto de la urgencia, de la necesidad, del tesón y del devenir humano, de la oportunidad, del momento€ de ahí que a los 717 años de existencia del concejo de Siero y a los 45 años de su construcción el Paraguas laminado del antiguo mercado de ganados sea uno de los símbolos de identidad de Pola, así como su plaza cubierta, ambas creaciones del ilustre ingeniero riojano Don Ildefonso Sánchez del Río.

No descubro nada nuevo si digo que los "paraguas" de hormigón eran una de sus especialidades, que tuvo su origen en su etapa de ingeniero municipal de Oviedo, hacia 1929, cuando el alcalde de Oviedo, don Manuel Caicoya y Vigil-Escalera, le dijo:

-Ildefonso, tenemos un problema que no sé cómo solucionar. Las lecheras se quejan de que no tienen donde protegerse, que cogen unas mojaduras impresionantes. ¿Qué haremos para resolverlo?

Ildefonso, sin dudarlo, de manera sencilla y natural contestó:

-Les haremos un paraguas.

Y mira por donde, de la necesidad se hizo virtud, y hoy los paraguas de hormigón son una de las grandes aportaciones de la arquitectura del siglo XX y más aún los paraguas de hormigón con cubiertas laminares onduladas como el nuestro.

Pero, como siempre, nos falta pedagogía, recuerdo, historia y valoración, de modo que si no recordamos o celebramos el 16 de octubre, fecha de la fundación de nuestro concejo, no tiene que sorprendernos que no pongamos en valor el Paraguas e incluso la obra de Ildefonso. Para muchos, el antiguo mercado de ganados, con sus típicos paraguas, era sólo el escenario de infancia de escenas pintorescas donde se reproducía el típico episodio de la lucha por la vida, entre vendedor y tratante, con la tercería del "pigarra" interesado, después de un trabajo previo de limpiar, lustrar y lucir la res, ya que, como decía Cervantes, "palo bien compuesto no parece palo€". Para romper el espejismo, el enamoramiento, la palabra lúcida y aguda del tratante que al dirigirse al vendedor dice: "¿ Qué, cuñao, cuánto vale la novilla? ¿Cuántos litros de lecha da la vaca?". "La vaca es noble y de mucha leche, más de treinta litros", responde el vendedor, pero apenas acaba contesta el tratante con su punzante lenguaje: "¿En cuántos días?".

Es historia reciente vivida por estos paraguas de piedra, uno de los cuales, el de mayor diámetro, de 40 metros y con una superficie de 1.256 metros cuadrados, casi un día de buyes, va a ser rehabilitado para prestigio y gloria de todo un concejo y sus gentes, y esto va a ser posible gracias a una serie de factores que por orden de importancia voy a tratar de resumir:

1. Esta exitosa solución que para el concejo de Siero se va a acometer no hubiera sido posible si la Fundación Juanelo y el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Madrid, con el asesoramiento del hijo predilecto de Siero don Urbano Arregui, no hubieran tenido la gentileza de comunicar a este Ayuntamiento, en el año 2010, la inauguración de una exposición dedicada a la trayectoria y obra de Don Ildefonso Sánchez del Río, ingeniero perteneciente a la llamada Generación del 27 de la Técnica, con importante obra en este concejo. A tal fin vinieron a este Ayuntamiento Doña Pepa Cassinello y Don Bernardo Revuelta, acompañados por don Urbano Arregui.

2. A partir de ese momento el contacto entre la Fundación y el Ayuntamiento de Siero fue constante. Prueba de ello que en la inauguración de la Exposición en Madrid, en la Escuela de Ingenieros de Caminos, estuvieron presentes técnicos de este Ayuntamiento como Don Benito Díaz Prieto, arquitecto municipal y Jefe de la Oficina Técnica Municipal, y la también arquitecta Doña María José Fernández Fernández.

3. Con fecha de 5 de julio de 2012, la exposición "Ildefonso Sánchez del Río", subtitulada "El ingenio de un legado", recala en la Sala de Exposiciones del Auditorio de Pola. Se inicia la misma con una mesa redonda en la que intervienen tres ponentes: Don Fructuoso Díaz Guerra, historiador local; la profesora de Arte de la Universidad de Oviedo Doña Ana Fernández García y el arquitecto y profesor de Estructuras de la Escuela Técnica Superior de Barcelona Don Robert Brufau, que da título a este artículo y que ha sido quien más ha hecho y hace por reivindicar la figura de Don Ildefonso en todos los ámbitos culturales, incluso en la propia Universidad. Su presencia entre nosotros ha sido posible gracias a los contactos mantenidos entre él y el arquitecto poleso Pablo Noval Montes, en aquel entonces alumno suyo, y al interés demostrado por la concejala de Cultura de entonces, Doña María José Sánchez, que hizo todo lo posible para que tan ilustre ponente estuviera en esa mesa redonda. Al final del acto, el alcalde de entonces, Don Eduardo Martínez Llosa, tuvo unas palabras de agradecimiento para los familiares de Don Ildefonso presentes en el acto.

4. A partir de esa rigurosa y documentada exposición, Ildefonso se nos hizo más próximo, más importante. Desde entonces, todos sabemos que el mejor reconocimiento a su figura es proteger, preservar el legado que tenemos en Siero, empezando por el paraguas de la estación de autobuses. Y hoy, cinco años después, el Ayuntamiento plantea que el Paraguas sea un elemento central en una plaza de diseño moderno.

5. Por todo lo expuesto quiero que estas palabras sean evidencia de mi alegría al ver que un proyecto tan importante para todos llega a buen puerto, después de un periplo iniciado en tiempos difíciles -crisis económica- y, además, de la mano de un experto capitán como es Don Robert Brufau, defensor de la importancia de la obra de un riojano, de nombre Ildefonso, nacido en Haro y afianzado en su profesión en la tierra de su padre, Asturias.

Para concluir estas palabras permítaseme que evoque el testimonio humano de una persona clave en la construcción de este Paraguas y protagonista de su inauguración, allá por el año 1973. Me refiero al alcalde de Siero en ese momento, don Julio Fernández Noval, que sucintamente retrata así lo vivido:

"Estábamos allí reunidos los técnicos responsables del Ministerio de Obras Públicas, todos los miembros de la Corporación Local, Don Urbano Arregui, el responsable del proyecto y de la dirección de obra, Don Ildefonso Sánchez del Río Pilón, y un humilde servidor, entonces Alcalde de Siero, Don Julio Fernández Noval, cuando en un momento dado Don Ildefonso dice:

-Señor Alcalde, van a quitar el encoframiento del Paraguas. ¿Te atreves a subir conmigo arriba?

-Don Ildefonso -le digo-, aunque yo estuviese convencido de que el Paraguas iba a caer, si usted sube delante, yo subo detrás.

No ocurrió ninguna anomalía. Estaba previsto que la cubierta pudiera descender un máximo de cinco centímetros. Sólo bajó dos centímetros".

Una vez más rigor y fantasía se dieron la mano y la historia celebró su triunfo

Don Ildefonso siempre ha dado muchas oportunidades a Siero y especialmente a Pola. No las perdamos. Mi felicitación al equipo de gobierno, a la Corporación y especialmente a la Oficina Técnica, que gracias a sus desvelos ha hecho posible que este proyecto se materialice, y al máximo responsable de su rehabilitación, Don Robert Brufau, que ha hecho suyo el lema de trabajo de Ildefonso: primero la forma, después el cálculo.

Vecinos de Siero, tenemos a Ildefonso nuevamente en ruta. No perdamos su estela.

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