El Juzgado de lo contencioso-administrativo número 1 de Oviedo ha condenado al Ayuntamiento de Teverga a que no vuelva a utilizar el cementerio de Carrea como recinto para el estacionamiento de vehículos durante las fiestas de Nuestra Señora del Cébrano. La sentencia es firme, ya que el Consistorio no ha presentado recurso de apelación, al que tenía derecho de acuerdo con el fallo judicial.

La denuncia fue interpuesta por Clotilde García en agosto de 2016, si bien el problema lo había advertido ya en 2015, cuando no pudo rezar ante la tumba de su hijo, Pablo Álvarez, fallecido cuando era un adolescente, y la de su madre debido a la presencia de los vehículos. Así es que al año siguiente, unos días antes de la festividad del Cébrano, entregó un escrito en el Registro municipal alertando de la situación y pidiendo al Consistorio la prohibición del acceso de los coches basándose en la legislación sobre el uso de cementerios, que sólo permite la entrada de las funenarias y vehículos de obras con autorización.

García no acudió en 2016 al Cébrano para no llevarse "un atragantón", tal y como explicó a LA NUEVA ESPAÑA. Pero, de nuevo, los coches estaban estacionados en el cementerio de Carrea. Una situación de la que tuvo conocimiento cuando le enviaron varias fotografías del camposanto con los coches estacionados.

Esa misma tarde interpuso una denuncia en el cuartel de la Guardia Civil de Piedras Blancas (Castrillón), donde reside, al entender que el cementerio "no es el aparcamiento de un supermercado". En su momento, el Ayuntamiento alegó que era una práctica aislada en el día de la fiesta y que, además, se había consultado con la Benemérita, siendo el camposanto el único espacio de aparcamiento posible.

Ahora los tribunales dan la razón a García y el aparcamiento en el cementerio de Carrea quedará prohibido. La sentencia también estima no imponer costas al Consistorio, ya que se puso "definitiva solución a la controversia manifestada, corrigiendo así la anómala situación producida con toda prontitud". El fallo es no utilizar el camposanto como aparcamiento.