Iba para matador de toros y terminó convertido en uno de los cantantes de tonada más singulares de la asturianada en los años treinta del pasado siglo. Sin embargo, su figura quedó enterrada en el olvido debido a su filiación política al PCE y acabó muriendo en el exilio después de haber pasado por varios campos de concentración en Francia. El músico y musicólogo Héctor Braga ha conseguido conocer cuándo y dónde murió Prudencio Merino "El Polenchu" tras una ardua labor de investigación. "Murió en Provenza en febrero de 1945", desveló.
Braga aportó información sobre "El Polenchu" dentro de las Jornadas de Estudios Locales de Grado, que organiza el Museo Etnográfico y el Círculo de Estudios Pramarenses. Su conferencia será incluida como artículo en la próxima revista "Grado/Grau, villa y alfoz" y también resume la vida y obra de otros dos cantantes destacados del concejo, Rogelio López Fernández "Gelín" y José Miranda González "El Repicáu".
"Hablar del 'Polenchu' en Grado equivale a hablar del mejor cantante de asturianada, un hombre de leyenda sobre el que hay supersticiones y rumores, quizá fue demasiado para Asturias, su arte se percibe fundamental", afirma Braga.
El sueño del "Polenchu" era ser matador de toros. Allá fue a Castilla a intentarlo pero en la capea, se puso a cantar y olvidó los toros. También era asiduo del mercado de Langreo, todos los lunes, donde aún le recuerdan los más mayores que tuvieron la suerte de verle cantar. También se sabe que estuvo en Madrid siendo parte del elenco de una zarzuela en el teatro "La Latina" de Madrid.
También estuvo presente en la visita de García Lorca y la compañía teatral "La Barraca" a Grado. Para ellos cantó dejando boquiabiertos a los actores y actrices hasta el amanecer. Pero la Guerra Civil truncó los sueños de Merino. "Era simpatizante comunista y se alistó en el ejército republicano", comentó Braga y mostró una fotografía en la que se ve al "Polenchu" puño arriba en Galicia junto a su batallón.
Tras la contienda, surgieron los rumores en la villa moscona de que había huido a Tánger (Marruecos), mientras que otros lo situaban en la Unión Soviética. Pero lo cierto es que estuvo en varios campos de concentración en Francia, liberado en 1942. En ese momento pide permiso para que su mujer, Rosario, e hija, Ángeles, viajen a Francia, cerca de Provenza. Ya siendo un hombre libre pero en plena segunda Guerra Mundial se alista en la Legión Extranjera, que lo reclama para realizar campañas contra Franco en España. "No sé si fue a la guerra o se quedó con la familia pero creo que estaba bastante enfermo, razón por la que pienso que lo liberan del batallón de trabajo", sostiene el investigador.
Tras contactar con su hija, Braga ha podido juntar todas las piezas del puzzle de la vida del "Polenchu". Es por ello que, durante la conferencia, pidió a los moscones presentes que se organizasen para realizar un homenaje a la figura de Prudencio Merino "por ser un verdadero maestro de la tonada asturiana".
Su implicación política y el no haber realizado ninguna grabación condenó al "Polenchu" al silencio pese a ser una de las figuras más importantes de la época en la tonada asturiana. Sin embargo, su nombre y sus gestas musicales siguen pasando de generación en generación en Grado, donde los moscones saben que hubo un cantante de tonada muy bueno que cantó para Lorca. Era el "Polenchu".
