La Asociación de Amigos de la Madera "Les Forgaxes" recibirá el "Urogallo" del Centro Asturiano de Madrid, este verano, en la Feria Internacional de Muestras de Gijón. "Aceptamos el premio con mucho orgullo", destaca su presidente, Javier Palacios. Fue el cronista de Lugones, José Antonio Coppen, quien ya les animó el año pasado a presentar su candidatura. Entonces no triunfó, pero este año sí tuvo éxito.

Su carta de presentación se basó en la defensa y recuperación del oficio de la tornería, extinguido, pues "el tornero manual artesano de toda la vida casi no se encuentra ninguno, simplemente por economía, porque no subsisten", destaca Palacios. Indica que en otros países han sabido adaptarse a las nuevas circunstancias dando un giro hacia el arte, creando piezas más bien de ardorno. Lamenta que "los antiguos torneros no dejaban ni herencia ni conocimientos en España porque trabajaban con todo el secreto que podían", para evitar que les copiaran su buen hacer.

La Asociación de Amigos de la Madera "Les Forgaxes" nació hace seis años y en este tiempo ha reunido 90 socios de distintos lugares del país. "Empecé con la talla, pero en torno me cautivó. Me llevó desde Nueva Zelanda a Cabo Norte", comenta Javier Palacios; por eso anima "a la gente que no sepa a qué dedicar el tiempo a entrar en la tornería porque es muy gratificante".

Por ejemplo, para Luis Miguel Jiménez fue su tabla de salvación. Hace 19 años sufrió una hemorragia cerebral y le afectó una hemiplejia en la parte izquierda del cuerpo. Salió del hospital en silla de ruedas y los médicos no auguraban su recuperación. Pero su gran fuerza de voluntad le hizo tirar para adelante. "El torno me ayudó físicamente, pero también psicológicamente", confiesa. Además, destacan el buen ambiente.