La moscona Julia Galán falleció ayer en Madrid a los 92 años y hoy mismo se celebrará su funeral en la iglesia de Grado. La nonagenaria era hija del que fuera alcalde a principios del siglo XX Adolfo Galán y madre del crítico de arte Fernando Martín Galán. Precisamente a través de éste Julia Galán se convirtió en los últimos años en musa de pintores hasta el punto de ser la protagonista de una colección de retratos realizada por artistas de todo el mundo -y que se ha expuesto en varias ocasiones en Asturias- en torno a la ancianidad. Una idea original del artista japonés Tatsumi Orimoto, conocido por basar su obra en la figura de su madre. La mujer, que veraneaba en la casa familiar de Salamir (Cudillero), recibió un homenaje en su Grado natal en 2013 y desde entonces, siempre que la salud se lo permitía, se acercaba a la villa. Enferma de párkinson, sus restos descansarán ahora en Asturias. Julia Galán deja cinco hijos y un gran número de nietos y biznietos, informa S. A.