El Ayuntamiento de Noreña ha elaborado otra propuesta de ordenanza de uso del asturiano con la que pretende sortear las barreras legales que hicieron que la anterior norma fuera anulada anulada por el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA). La nueva norma ha sido propuesta por las cuatro fuezas políticas que habían aprobado la anterior en el Pleno, es decir IPÑ, Conceyu Abiertu por Noreña (CAN), Izquierda Unida y Foro, que quisieron hacer coincidir ayer la presentación con el Día de la Lengua Materna.

El concejal CAN, Antonio Martínez, explicó que los proponentes han presentado su propuesta al resto de partidos, PSOE y PP, para que se sumen con sus aportaciones y conseguir el mayor consenso posible.

Respecto del contenido de la nueva norma, el concejal subrayó que "en ningún caso implica una declaración de oficialidad de la lengua asturiana en el concejo de Noreña, sino que únicamente constituye la regulación mediante la cual el Ayuntamiento de Noreña pretende dar cumplimiento a la previsión del artículo 8.1 de la Ley 1/1998, del 23 de marzo, de Uso y Promoción del Bable/Asturiano". Dicho artículo dispone que los ayuntamientos "podrán adoptar las medidas necesariaspara asegurar la efectividad del ejercicio de los derechos lingüísticos que esta Ley otorga a los ciudadanos residentes en Asturias".

Aparte de la carencia de un informe económico, una de las razones por las que la ordenanza fue anulada fue el hecho de que se equiparase el asturiano al castellano, cuando en realidad el castellano es oficial y el asturiano, no. Entonces, los apartados en los que en la anterior ordenanza se decía que "la lengua asturiana o asturiano es, junto al castellano, la lengua propia del concejo de Noreña" han sido suprimidos.

Como expresó Antonio Martínez, en esta nueva propuesta "se han pulido y simplificado algunas cuestiones para intentar evitar que pudieran dar lugar a algún malentendido o algún problema jurídico".

La redacción y propuesta de la ordenanza no es sino el principio de una tramitacion que los representantes de los partidos creen que llevará su tiempo. En cualquier caso, lo importante es que la norma salga adelante con todas las garantías. Su interés es "iniciar una tramitación administrativa completa" y "que se puedan solicitar en tiempo y forma informes a unos servicios municipales que tienen su carga de trabajo y sus tempos de realización". Para garantizar la viabilidad de su propuesta, además de incorporar el preceptivo informe de sostenibilidad financiera, han considerado necesario contar también con un informe de Secretaría que, aunque no sea obligatorio, ayude a la tramitación y sea "la base del debate junto a las distintas aportaciones que puedan existir de los demás grupos".

Se trata, insisten, de una normativa de uso que no tiene por qué contravenir las leyes generales sobre las lenguas. Han confluido en la elaboración de la norma grupos de un amplio espectro ideológico.

Y el hecho de haber puesto de acuerdo a todos estos partidos es, consideran, "un ejemplo de que es posible seguir sumando y que la lengua y los derechos lingüísticos son universales y de todos, independientemente de nuestra ideología".

Otra forma de garantizar que cuando se apruebe la norma sea ya definitiva es la propia tramitación. Como explicó el portavoz de IU, René Coviella, una vez que se debata en comisión y se incorporen todas las propuestas, la ordenanza se llevará al Pleno para su aprobación inicial, y a partir de ahí se abrirá un período de alegaciones en el que se podrán debatir los preceptos. En cualquier caso, los proponentes recuerdan que hay muchas ordenanzas como esta en otros concejos que no representan ningún problema.