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Noreña niega el permiso de vertido al Matadero por no consultar al Principado

El Ayuntamiento tramita la licencia de actividad, pendiente de un estudio para certificar el buen estado de la instalación

Luis Alberto Sánchez Panero y sus hijas, Marta y Cristina. M.M.

El Ayuntamiento de Noreña ha denegado la autorización de vertido solicitada por la empresa Serincar para el Matadero Central de Asturias, ubicado en la Villa Condal. Así lo han notificado a los interesados tras la firma de un decreto con fecha del día 9. Unos días antes, los responsables municipales también ordenaron parar las obras de construcción de un surtidor de gas que se estaban ejecutando en el recinto del macelo por carecer de licencia.

La decisión de no permitir vertidos deriva de un informe de la oficina técnica municipal, que a su vez se basa en actuaciones del Principado, que es la autoridad competente. Pero esta autorización de vertidos se tramitará y resolverá junto con la licencia municipal de actividad, que sí concede el Ayuntamiento, apoyándose en el reglamento de actividades molestas, insalubres, nocivas y peligrosas.

Los nuevos propietarios del matadero, inaugurado en enero, solicitaron el cambio de titularidad del macelo, que está en trámite. Esta gestión está acogida al procedimiento de Autorización Ambiental Integrada, pero aún no ha habido acuerdo del órgano ambiental del Principado de Asturias. Por lo que no se ha aprobado la concesión de la licencia de actividad (municipal) ni autorización de vertido (autonómica).

Fuentes de la Consejería de Medio Ambiente explican que el matadero tenía concedida una autorización ambiental integrada anteriormente. Pero con el cambio de titularidad se reduce la actividad, con menor número de reses sacrificadas, por lo que queda fuera del ámbito de la ley de prevención y control integrados de la contaminación, pasando a ser una actividad regulada por el reglamento de actividades molestas, insalubres, nocivas y peligrosas. Es el Ayuntamiento quien ha de conceder esa licencia. Además, Se requiere autorización de vertido y como actividad potencialmente contaminadora de la atmósfera, que son de competencia regional. "Pero la consejería no ha concedido ninguna de estas dos autorizaciones porque no nos consta que se hayan solicitado", afirman.

Por otro lado, en el informe de la oficina técnica municipal se recoge que "dado el periodo en el que las instalaciones se encuentran paralizadas, su puesta en marcha requerirá la memoria técnica y certificación de técnico cualificado del estado de las mismas" para asegurar su eficacia y garantizar los niveles de vertidos con arreglo a la ley.

Según la documentación técnica que maneja el Ayuntamiento, los vertidos de la actividad industrial del Matadero Central "se realizan de forma directa a la red de saneamiento", que es de competencia autonómica. Según la normativa, el interesado ha de tramitarlo directamente en la Junta de Saneamiento del Principado de Asturias.

Las licencias están siendo un quebradero de cabeza para los propietarios del Matadero Central (del grupo Panero) pues la Asociación de Mataderos, Mayoristas y Salas de Despiece de Asturias piden que se suspenda la actividad hasta que no estén todos los permisos en regla. No obstante, gran parte del sector cárnico defiende el correcto funcionamiento del macelo y sus dueños garantizan la legalidad de sus instalaciones.

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