Hay seis nuevos habitantes en los cercados del Parque de la Prehistoria de Teverga, que ayer dio la bienvenida a tres ejemplares de gamo y otros tres de ciervo, un macho y dos hembras por especie. Los animales se suman a la pareja de caballos Przewalski, los neo-uros y el bisonte europeo que campan por el espacio, al que animarán con la compañía de una nueva pareja en los próximos meses. Además, una de las hembras de gamo podría estar preñada. "Hay muchas posibilidades y, si están muy bien alimentados y sin ciclos de invierno duro, podrían preñar todos los años", explicó Fernando Morán, presidente del Centro de Conservación del Bisonte Europeo en España.

Los ciervos se dejaron ver sin problemas, pero, eso sí, sin dejar de vigilar cada uno de los movimientos de los visitantes, entre los que estaban la directora general de Patrimonio, Otilia Requejo, y la alcaldesa de Teverga, María Amor Álvarez. Muy dispar fue la conducta de los gamos, escurridizos, rápidos y camuflados entre la maleza. Apenas se mostraron, pero cuando lo hicieron captaron toda la atención por su belleza y su parecido con el cinematográfico "Bambi". Para disfrutar de ellos sólo habrá que permanecer un rato a la espera, en silencio.

"La incorporación de nuevos animales hace el Parque más atractivo y es bueno para el territorio porque nos distingue de otros lugares, debemos mantenerlo porque se puede ver la fauna en vivo que está representada en las cuevas", comentó la regidora.

Los ciervos y gamos se adaptan al territorio mientras el Parque espera la llegada de dos nuevos bisontes, de entre cuatro y cinco años, que proceden de dos proyectos de conservación en semilibertad en Holanda.