El grupo "Xentiquina", desaparecido hace ya unos cuantos años, revivió ayer, y de qué manera, en el auditorio de la Pola. Fue en un homenaje que le hizo la Consejería de Educación con motivo de la Selmana de les Lletres Asturianes. Su creador, compositor y director, Nacho Fonseca, se subió a ultima hora al escenario con un grupo de aquellos niños que cantaron con él en el colegio público de Lieres hace tantos años, y que ya estaban bien crecidos y con la voz cambiada.

Antes de ellos, sí se subieron muchos niños al escenario: los coros de los colegios Xentiquina, de Lieres, Hermanos Arregui y Celestino Montoto, y de la Sociedad Siero Musical, para refrescar algunas de aquellas canciones con las que Fonseca había conseguido entusiasmar a varias generaciones de niños introduciéndolos, de paso, en la lengua asturiana.

Sonaron canciones como "Yera la princesa d'un país", "La primavera", "Bambi" o "Lenteyes non" de la mano de estas voces nuevas, y también se pasaron varios vídeos con imágenes y grabaciones históricas de Xentiquina y su director, entre ellas algún gran éxito como el "Bocadillu Rock", que fue respondido por el público con palmas.

El momento cumbre llegó cuando Fonseca, con su coro de niños crecidos interpretó dos de las canciones míticas de Xentiquina, y animó al público a participar como si nunca se hubiera bajado del escenario, como si Xentiquina no se hubiera parado nunca.

La primera fue "Una de mieu" y la guinda, la mítica "El coche'l maestru", que corearon niños y mayores para demostrar que Xentiquina, por mucho tiempo que pase, sigue teniendo la misma pegada de siempre.