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Freno al párkinson en la Pola

Una carrera de karting sirve para dar a conocer la enfermedad: "No tenemos que ser mayores ni temblorosos para padecerla"

Punto de inscripciones e información, en el Karting de la Pola. M. M.

"No tenemos que ser mayores ni temblorosos para padecer párkinson". Son dos falsos mitos que quiere desterrar Santiago García, presidente de la Asociación Parkinson Asturias, en actividades como la carrera solidaria que ayer tuvo lugar en el Karting de la Pola. "Básicamente, la intención es dar a conocer la enfermedad", que él mismo padece, "más que la recaudación en sí". Así todo, lograron reunir a unos 30 pilotos para competir y a unos 80 comensales. También abrieron una fila cero para recoger donaciones.

Se estima que en Asturias hay más de 4.000 personas afectadas, destaca la directora de este colectivo, Yolanda Villanueva. Alrededor del 20% tiene menos de 45 años y el paciente más joven de la asociación tiene 37 años. También apunta que "hay pacientes que nunca tiemblan", a pesar de que es el síntoma que popularmente se asocia al párkinson. Explica que se trata de una enfermedad neurodegenerativa crónica y progresiva, que afecta al sistema nervioso. En el paciente se traduce en síntomas motores, como falta de equilibrio o temblores, pero también no motores, del tipo de trastornos del sueño, control de impulsos, deterioro cognitivo o depresión. "Un signo bastante común es la lentitud de movimientos o bradicinesia", indica.

"Se te cae el mundo encima" cuando uno se entera de que padece párkinson, reconoce Santiago García. A él le ocurrió hace diez años y lo primero que pensó fue no sólo en cuál sería el futuro que le esperaba, también el de su familia. "Me llamó la atención el deterioro de la escritura", confiesa el presidente de la asociación. Después fue notando que se le "agolpaban ideas en la cabeza y no puedes transmitirlas" y también perdió habilidad manual. Por ejemplo, tras dar cinco vueltas con el destornillador, ya no podía seguir.

Indica que "no existe una prueba definitiva" que concluya que un paciente padece párkinson. El diagnóstico se realiza "por descarte y por clínica", indica. También deja claro que "no hay dos pacientes iguales". Como en su caso, en los años iniciales de la enfermedad tratan de llevar con normalidad su vida "lo mejor posible". En algunos, como Santiago García, los síntomas de su dolencia llegan a pasar desapercibidos para muchos, pues es capaz de enfrentarse a retos como el de ayer. Se puso el mono y el casco para competir en esta carrera solidaria que promovió. Los karts son una de sus aficiones y, a pesar del párkinson, ayer volvió a subirse a uno.

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