Mieres del Camino,

Paula G. RODRIGO

Pinta para plasmar sus sentimientos, vivencias y recuerdos. Mezcla colores y deja libertad para que el espectador pueda pensar libremente sobre la obra que tiene enfrente. Rodrigo Martín trae desde Barcelona a la Casa de Cultura de Mieres algunas de las obras expuestas recientemente en la Ciudad Condal y, cómo no, alguna que otra primicia para su tierra.

«Me dejo influenciar por la ciudad, por la gente...», comienza a explicar Rodrigo Martín su trabajo. «La obra actual se diferencia en el colorido que tiene ésta. Antes hacía retratos de personas mayores; me interesaba el paso del tiempo», relata. «Incorporo nuevos materiales como el carboncillo, que lo uno al óleo», apunta Martín. «Tal vez sea por dar la contraria al resto, pero me gusta estar en contacto con materiales más primitivos».

«Los paseos, las veces que callejeo y me pierdo, los recuerdos, cuando contemplo fotos... es lo que me sirve de inspiración». Con una sonrisa en la cara, le echa la culpa a los aires del Mediterráneo.

Reconoce que de autores consagrados como Cy Twombly o Joan Mitchell ha tomado «la espontaneidad y el gesto. Pienso que la pintura figurativa es una realidad falsa», añade Martín. Por eso, él prefiere decantarse por un arte menos concreto. «El dibujo sin completar es divertido porque puedes interpretarlo, te puedes quedar con lo que tú quieras. Todo es cuestión de verlo. Pero la gente se cierra y no lo quiere», apunta. «Yo, en mis trabajos, dejo que el color tome importancia y sea el protagonista; es más importante que lo que quieras enseñar en el cuadro», resuelve.

Rodrigo Martín actualmente vive en Barcelona, donde ha finalizados sus estudios de Bellas Artes. Su formación en la Ciudad Condal se complementa con la recibida en Bilbao y en Langreo, donde comienza. Como destaca el artista, las visiones del arte en los distintos puntos geográficos distan bastante de las que se tienen en su tierra natal. «En Asturias la gente quiere ir a ver una exposición en la que puedan ver las cosas claras -un perro, un hórreo...- y no se complican mirando más allá», señala.

«Barcelona: vacui», el nombre con el que ha sido bautizada esta exposición, está compuesta por 15 obras que se exhibirán en la Casa de Cultura de Mieres hasta el próximo 28 de agosto. Colores, formas y abstracción en paredes que abren las puertas de la imaginación. Pasen y vean.