Rioturbio (Mieres), I. G. A.

Después de una semana de descanso, la penúltima eliminatoria del concurso «Cuenca del Caudal» subió al escenario a ocho cantantes. Lo que, sumado a las ausencias obligadas por la gripe y las infecciones de garganta de las últimas semanas, convertirá la última de las eliminatorias, la del día 19, en una concentración de cerca de una quincena de voces a concurso.

Abrieron el camino Enrique Castañón, con «Cantar bien, neña», y Arturo Cortina, con «Caminito del puerto», para dar paso a uno de los más jóvenes valores del concurso, Héctor Braga, que se atrevió valientemente con clásicas como «Vite baxar per el monte» o «Carromateros».

Otra gran voz, la de Fernando García Nuño, empezó su intervención con «Cuando oigo sonar la gaita», seguido de Juan Robledo Iglesias, que cerró la suya a la gaita con «Debaxo del campanariu». Brillante también fue la actuación de José Antonio González, «Cantu la Vara», con las dos que hizo sin gaita, «Viva la xente minera» y «Soi del conceyu d'Uviéu», para cerrar a la gaita de Berto Varillas con «Dos villes tiene Llangréu». Le siguió la actuación de Andrés Cueli, otra de las grandes voces habituales de este concurso, que comenzó solo con «Baxaba Barrial de Casu». El turno de actuaciones a concurso se cerró con otro de los grandes del cuenca del Caudal, Juan José Martínez, con impecables versiones de temas clásicos. Para concluir, con una brillantez extraordinaria, Anabel Santiago. Por un lado, con la tranquilidad que da no estar concursando, pero también con la serenidad que ofrece esta voz tantas veces vencedora en tantos concursos y ahora profesora de canto en diferentes escuelas. Con la eliminatoria del próximo sábado se cierra esta fase. A partir de ese momento el concurso pasa al auditorio Teodoro Cuesta de Mieres y será retransmitido en directo por la TPA.