Madrid, MODEM PRESS

En la planta instalada en el Grupo III de la central de Compostilla II de Cubillos del Sil, la captura del CO2 se produce por el contacto en contracorriente de los gases de combustión con una solución absorbente de aminas a baja temperatura. «Durante el proceso, el CO2 se une químicamente a la amina con lo que es separado de los gases. La amina se regenera en un segundo reactor mediante calor aportado por vapor, produciendo CO 2 muy concentrado», según explicaron fuentes de la eléctrica.

Los mismos portavoces de Endesa señalaron que la principal novedad que presenta esta planta es que captura CO2 de gases de una central térmica convencional de carbón, ya que hasta ahora, la tecnología comercial solo se aplicaba en otras industrias, como refinerías, donde el volumen de gases a tratar era muchísimo menor y la concentración en CO2 de estos gases muchísimo mayor. Además usará nuevos absorbentes desarrollado en el laboratorio, distintos de los absorbentes comerciales que normalmente se utilizan en otros procesos industriales.

Las aminas que se emplean en este proceso son compuestos químicos orgánicos que aparecen como derivados del amoníaco y resultantes de la sustitución de los hidrógenos de las moléculas. El proceso de captura de CO2 por absorción química de este tipo de tecnología es posterior a la combustión, diferente, por ejemplo al que se implantará en Ciuden (Ponferrada), mediante oxicombustión durante el proceso de combustión, o al de Elcogas, que captura el CO2 en el momento anterior a la combustión.

Según explicaban los portavoces de Endesa esta tecnología ya funciona con éxito en otras industrias y sectores y es la primera vez que se experimenta en centrales térmicas convencionales. «Es una tecnología madura en otros sectores industriales, como el refino de productos petrolíferos, por ejemplo, pero está en fase experimental para centrales eléctricas como es la de Compostilla, aunque nosotros estamos convencidos de que aquí también será un éxito», finalizaron.