Mieres, D. MONTAÑÉS

El rey se ha enrocado y los peones deben reubicarse en el tablero. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, defendió hace ocho días en León el plan energético en que se enmarca el desarrollo de la polémica línea de alta tensión Sama-Velilla, que cuenta con una fuerte y beligerante contestación social. Las reacciones de las familias socialistas no se han hecho esperar. Los responsables del partido a nivel de Castilla y León han dado una nueva vuelta tuerca a una posición que cada vez se torna más ambigua y alejada de los intereses de los opositores al proyecto. Su secretario general, Oscar López, sostiene tras el pronunciamiento de Rodríguez Zapatero que «estamos ante un conflicto cuya solución corresponde al Gobierno central». Hasta la fecha, los socialistas castellanoleoneses, aunque sin oponerse al proyecto, había reclamado consenso, un término que ahora parece despejado de la ecuación.

Mientas los dirigentes autonómicos del PSOE están cada vez más próximos a los directrices fijadas desde Madrid, a nivel provincial los socialistas leoneses no ceden terreno, abriendo una brecha entre las posiciones de ambas familias. José Luis Rodríguez Zapatero justificó esta gran infraestructura y utilizó para ello unos argumentos contrarios a los del PSOE leonés, que ha asegurado en varias ocasiones que el tendido no pasará por la provincia. «El problema de la línea Sama-Velilla es que todo el país quiere tener energía con capacidad suficiente, cada vez más barata, y tener instalaciones industriales», aseguró el jefe del Ejecutivo español, quien también matizó que la administración central «trata de combinar y hacer compatible esas necesidades con el respeto al medio ambiente», pero que en ningún momento descartó la autopista eléctrica.

Pese a que los vientos soplan cada vez más de proa, hay quien prefiere seguir viendo el vaso medio lleno. Así, Francisco Fernández, alcalde de León y secretario provincial del PSOE, matizó esta semana que «en ningún caso» el presidente del Gobierno ha asegurado que la línea de alta tensión «Sama-Velilla» se vaya a realizar. En este sentido, matizó que hay «un estudio» y una «necesidad» de evacuar la energía hacia la Meseta, pero «otra cosa es el cómo» se traslada esa energía. Francisco Fernández no ha dudado en felicitar a las plataformas que se oponen a la línea Sama-Velilla «por el modo con el que se están oponiendo al trazado, que es con argumentos». Además el alcalde de León advirtió que habría que preguntar «al presidente de la Junta por el documento que firmó con Asturias».