Las empresas privadas llevan sin facturar desde que Hunosa les comprara el cupo de carbón del mes de febrero por lo que la tesorería de la mayoría de ellas se encuentra bajo mínimos. Esto a llevado a algunas de ellas, en concreto de los grupos Victorino Alonso y Lamelas Viloria , a dejar de abonar las nóminas a los trabajadores. Otras que hasta ahora sí han pagado los sueldos, como la aragonesa SAMCA o la Hullera Vasco Leonesa, no descartan expedientes de regulación de empleo.
La situación del sector, que lleva prácticamente un año y medio sin poder vender el carbón que produce a las compañías eléctricas, se ha visto agravada en los últimos meses por la tardanza en la aprobación definitiva del real decreto de ayudas y, desde el mes de febrero, con la negativa del Ministerio de Economía a seguir aportando más fondos para que Hunosa continuara comprando carbón a las empresas privadas. En su día, Industria era partidario de la prórroga en el mandato a Hunosa, pero la vicepresidenta segunda del Gobierno, Elena Salgado, se negó rotundamente a continuar aportando los aproximadamente 33 millones mensuales que costaba mantener esta medida transitoria. La crisis económica hace ahora impensable un cambio de oponión. Desde Industria no se quiso adelantar ayer si se estaba estudiando alguna otra medida mientras el real decreto sea operativo, como exigen sindicatos y empresarios, para alimentar las depauperadas arcas de unas empresas que desde febrero sólo han ingresado los 14 millones mensuales que recibe el conjunto del sector en concepto de ayudas al funcionamiento. Hunosa, hasta el pasado mes de febrero, adquirió cerca de 4 millones de toneladas de mineral por un importe que se sitúa en el entorno de los 200 millones de euros.
