Soto de Aller / Felechosa,

L. C. / D. M.

Cientos de personas acudieron ayer a las celebraciones en honor de la virgen de Miravalles, que tuvieron lugar en la localidad allerana de Soto de Aller. La virgen, alcaldesa perpetua del concejo por decreto de la Corporación municipal de Aller en el año 1951, cuenta con numerosos devotos en el municipio y, de hecho, su jira es una de las más importantes y concurridas de todo el concejo.

Los romeros comenzaron su peregrinación hasta el santuario de Miravalles a primera hora de la mañana. Primero con la procesión de la imagen religiosa, que parte de la parroquia de Soto de Aller hasta la ermita. Una vez allí, al mediodía, el nuevo párroco del pueblo, Enrique Iglesias, acompañado por Andrés López, responsable de la parroquia de Boo, presidió la tradicional homilía, que finalizó con un nuevo desfile religioso de la virgen, esta vez por el entorno de la ermita. Además de los fieles, que no dejaron de admirar a su patrona, también acompañaron a la imagen los miembros de la banda de gaitas «La Viga Travesá» de Moreda, quienes pusieron la nota musical en este desfile religioso.

Una vez terminados los actos litúrgicos, se iniciaron los más lúdicos. Así, los romeros se congregaron en el prau junto a la ermita, así como en el área de recreo para degustar una sabrosa comida campestre que fue regada, como manda la tradición, con sidra. Sin duda el buen ambiente fue el principal protagonista de esta jornada festiva, en el que la meteorología también ayudó, con un sol radiante durante todo el día que permitió que el ambiente festivo se prorrogara hasta últimas horas de la tarde.

La fiesta en Miravalles no fue la única cita festiva en el concejo de Aller. Felechosa celebró en la vieja capilla de la Virgen de la Ermita una misa con procesión. Los vecinos se volcaron con esta modesta fiesta que intenta, poco a poco, convertirse en una evento de mayor calado. Los vecinos de Felechosa explicaron que esta celebración «cada años tiene más adeptos». Al mediodía de ayer se reunieron en el templo decenas de personas. El objetivo de los fieles es lograr que la celebración sirva de impulso para abordar la rehabilitación de la ermita. «Es un templo con varios siglos de antigüedad que esta bastante deteriorado y esperamos lograr abordar una obra de saneamiento», apuntó ayer la comisión organizadora. En este sentido, los vecinos están incluso dispuestos a buscar una fórmula que les permita lograr su objetivo: «Cuesta sacar adelante este tipo de iniciativas, pero estamos decididos a mejorar el aspecto de este emblemático inmueble».