Oviedo / Madrid

El presidente del Principado, Vicente Álvarez Areces, calificó ayer como una «magnífica noticia» que la Comisión Europea haya aceptado prorrogar hasta 2018 las ayudas a las minas de carbón deficitarias, cuatro años más de lo que había propuesto inicialmente. Areces se mostró «satisfecho» con la decisión de la Comisión que, según el dirigente asturiano, ha sido «sensible» a una posición «argumentada», «seria» y «razonada» de distintas instituciones, incluido el Gobierno asturiano.

En el escenario que marca esta prolongación de las ayudas (con una reducción progresiva de su cuantía) Areces apuntó que supondría «ganar tiempo», fundamentalmente para potenciar los trabajos en todo lo referente al secuestro de CO2. De esa forma, y con esas tecnologías se eliminaría el elemento de rechazo que existe hacia el carbón. El presidente insistió en el valor de la decisión de la Comisión, teniendo en cuenta las «dificultades» que existían.

Por otra parte, el eurodiputado asturiano del Partido Popular, Salvador Garriga, se mostró desilusionado con el acuerdo tomado ayer. El responsable de los populares aseguró «lo acordado hoy -por ayer- no era en absoluto lo que esperábamos porque lo que hay es un plan de cierre de las explotaciones mineras». Garriga explicó que «es cierto que se extienden las ayudas hasta el 2018, pero dentro de un plan de cierre y con una regresividad en las ayudas muy fuerte», por lo que según dijo «habrá que analizar más la letra pequeña, pero desde luego, no es una buena noticia para la minería española y asturiana».

Por último, desde IU, el resonsable federal de Energía, Adolfo Barrena, valoró «positivamente» el paso adelante de Bruselas, aunque recordó que «el futuro del carbón, sigue en peligro».