Langreo, M. Á. G.
La caída de explotaciones ganaderas dedicadas de forma exclusiva a la producción de leche ha seguido en las Cuencas un ritmo parecido a la reducción del censo de vacas lecheras. En concreto, sólo pervive una lechería en las comarcas mineras y está en Langreo. En los últimos 18 años, 577 explotaciones tuvieron que echar el cierre en los valles del Nalón y del Caudal. De forma paralela, también se produjo una significativa bajada en la producción de leche. De los más de 3 millones de kilos de 1993 se han pasado a rondar los 100.000 kilos de la actualidad.
Por concejos, la zona donde más se ha dejado sentir la caída de explotaciones del sector lácteo ha sido Langreo. Este municipio ocupaba hace dos décadas el primer lugar de la listas, con un total de 181 leches. Por su parte, San Martín del Rey Aurelio registraba 124, frente a las 93 de Laviana, las 63 de Caso y las 27 que M. Áhabía en Sobrescobio. En la comarca del Caudal, la implantación de explotaciones dedicadas de forma exclusiva a la producción de leche fue menor, con lo que la bajada, al menos en términos globales, fue menos acusada. En 1993, Mieres tenía 42 lecherías; Morcín, 35, y Lena, 13. Por su parte, Aller y Riosa no disponían de ninguna explotación lechera.
El titular de la ganadería lechera que queda en Langreo se llama Javier López Estébanez. Este ganadero, dedicado al sector desde hace más de 20 años, tiene su explotación en la zona de Gargantada.
