Langreo, L. M. D.

«El Gobierno central del PP, con la supresión de los fondos mineros, lo que hace es acabar con los más débiles. Debemos revelarnos». Así de clara fue ayer la alcaldesa socialista de Langreo, Esther Díaz, que calificó la decisión del Ejecutivo que encabeza Mariano Rajoy como «el cierre definitivo de las Cuencas». La regidora llegó incluso a calificar la necesidad de dar marcha atrás a esta decisión como «nuestra cruzada particular».

Díaz se mostró ayer dispuesta, como alcaldesa de Langreo, a dar «todo el apoyo posible» a los sindicatos mineros en caso de que haya movilizaciones de protesta. «Espero equivocarme para que los sindicatos salgan con buenas noticias de la reunión del lunes. Pero si vienen con malas noticias, que es lo más posible, debemos estar al lado de los sindicatos en las movilizaciones. Debemos movernos, no quedarnos atrás», afirmó la regidora langreana, que está manteniendo estos días una ronda de reuniones con asociaciones de vecinos de todo el concejo. En estos encuentros les está poniendo de manifiesto la «crítica situación» en la que «nos deja esta decisión» y la necesidad de «respaldar las movilizaciones que se planteen».

«Tengo claro», apuntó Esther Díaz, «que si se suprimen los fondos, no se captarán nuevas empresas, la actividad minera cerrará y la formación, sin becas, será más difícil. Se está cerrando la puerta al desarrollo de unas comarcas muy concretas como son las Cuencas mineras». «Si en dos meses esta situación no se arregla», continuó la alcaldesa de Langreo, «entraremos en una situación realmente crítica. Y todo lo invertido hasta ahora será dinero en balde. ¿Para qué queremos carreteras o mejorar los saneamientos si no logramos que la gente, especialmente los jóvenes, se queden aquí? Hay que cambiar la decisión, pero soy pesimista».