Sotrondio, J. A. VEGA

El presente y futuro de la farmacia en Asturias fueron los ejes que marcaron la charla impartida por el vicesecretario del Colegio de Farmacéuticos de Asturias, Juan Roces Díaz, en el Aula de Cultura La Plaza de Sotrondio. El acto, organizado por la Asociación de Antiguos Alumnos de la Academia de Juan José Calvo Miguel en colaboración con el Club LA NUEVA ESPAÑA en las Cuencas, fue presentado por César González, que hizo un recorrido por el currículum profesional del ponente.

Roces comenzó su charla destacando que «una farmacia es mucho más que un comercio porque detrás hay mucho trabajo que no llega a la población». Así, las describió como establecimientos sanitarios privados de interés público donde se preparan, custodian y dispensan medicamentos conforme a la normativa y garantías legales. Hasta comienzos del siglo XX la formulación y preparación de medicamentos se hacía en la oficina de farmacia. Eso ha evolucionado y ahora corre a cargo de la industria farmacéutica, pero siguen siendo farmacéuticos los que coordinan e investigan la formulación y preparación de medicamentos. Roces señaló que en las últimas décadas se ha logrado llevar el medicamento preciso al paciente que lo necesita «en igualdad de condiciones para todos los ciudadanos».

Asturias cuenta con 457 de las 21.364 farmacias que existen en España. La comarca del Nalón tiene en la actualidad 37 establecimientos. El ponente aclaró que ni los farmacéuticos ni el colegio regulan las nuevas aperturas, sino que lo hace el Gobierno del Principado de Asturias. Y resaltó que en muchas poblaciones «el farmacéutico es el único profesional sanitario existente». Otro dato que destacó en su presentación fue la informatización de las farmacias, que en el caso de Asturias llega al 100%, «algo que no ocurre en toda España».

Pero la tarea de un farmacéutico no se ciñe sólo a la mera dispensación de medicinas. Informan a los pacientes sobre el uso seguro y eficaz con el fin de prevenir duplicidades, interacciones, contraindicaciones y reacciones adversas. Asimismo, recogen medicinas caducadas, en mal estado o que ya no se necesitan a través de los puntos SIGRE. Treinta y nueve farmacias asturianas participan en el programa de dispensación de metadona. Y no olvidan el apartado educativo, ya que participan en acciones de educación para la salud con charlas para más de 4.000 escolares y acogen a estudiantes de último curso de Farmacia para que hagan prácticas tuteladas.

Como vicesecretario del Colegio de Farmacéuticos de Asturias, Juan Roces señalo que la entidad se hace responsable de la ordenación, representación y defensa de los derechos e intereses de los colegiados, velando por la ética profesional y elaborando guías de buenas prácticas.

Juan Roces dio pistas sobre el futuro al que se enfrentan las farmacias y habló de «la implantación de la receta electrónica para el próximo año, lo que supondrá la desaparición del papel y la racionalización del gasto farmacéutico». También dispondrán de sistemas personales de dosificación de medicamentos para personas mayores que tienen dificultades con las dosis y harán atención farmacéutica a centros sociosanitarios Finalizó su intervención reivindicando que las farmacias están centradas en el servicio al paciente y con vocación de servicio a la sociedad.