Mieres del Camino,

Andrés VELASCO

A menos de un mes para el cierre oficial de la temporada de esquí, los aficionados al deporte blanco tienen ante sí uno de los últimos fines de semana para disfrutar de la nieve. Podrán hacerlo en la Cordillera Cantábrica sobre más de 40 kilómetros de pistas, 17 de ellos en las estaciones de Asturias.

El complejo invernal de Valgrande-Pajares, que ya ha superado los 50.000 usuarios en lo que va de temporada pese a las dificultades para arrancar la campaña, prevé abrir un total de 8,82 kilómetros esquiables, divididos en quince pistas. Estarán operativos durante el fin de semana seis remontes: dos telesquíes y cuatro telesillas.

Mientas, la estación de Fuentes de Invierno, lastrada durante los primeros meses de temporada por la falta de nieve, prevé abrir este fin de semana 13 de sus 15 pistas, con una superficie esquiable total de 8,1 kilómetros. El complejo allerano pondrá a disposición de sus usuarios los cinco remontes disponibles.

En la vecina provincia de León, San Isidro, unas instalaciones utilizadas cada invierno por miles de esquiadores asturianos, será de nuevo la referencia de la Cordillera Cantábrica, con la apertura de más de una veintena de kilómetros habilitados para el esquí. En total, serán 23,8 kilómetros los que ofertará la estación leonesa si el tiempo lo permite. La superficie estará dividida en 20 pistas y se abrirán ocho remontes para dar acceso a las mismas.

Por último, el otro complejo leonés, el de Leitariegos, habilitará poco más de 3 kilómetros y medio para la práctica del esquí. Al igual que Fuentes de Invierno, estas instalaciones fueron de las últimas en iniciar la temporada. Para hoy y mañana se prevé la apertura de cinco pistas del complejo y de cuatro remontes.