Pajares,C. M. BASTEIRO

Inversiones Inmobiliarias Valmurián, empresa propietaria del parador de Pajares, ha puesto a la venta el inmueble por casi el triple de su precio de adquisición. La inmobiliaria se hizo con el parador en una subasta del Ministerio de Economía por 510.000 euros. Ahora, el emblemático equipamiento hotelero se vende en el circuito privado por 1,5 millones de euros.

Valmurián adquirió el parador de Pajares en marzo de 2010. Presentó la única oferta a la cuarta subasta del Ministerio, que tenía entonces un precio de salida de 473.421 euros, cuando el resto de convocatorias ya habían quedado desiertas. Los responsables de la empresa anunciaron su intención de mantener el uso del histórico hotel de montaña, inaugurado en 1953. La inmobiliaria aseguró que estudiaba dos proyectos: convertir el edificio en un hotel con spa o en un apartahotel. Los planes, finalmente, se quedaron en humo. En noviembre de 2011, el cartel de «se vende» apareció en la fachada del inmueble. Valmurián puso a la venta el parador sin haber acometido una reforma en profundidad. Fuentes de la empresa reconocieron que las obras se habían quedado en mejorar la cubierta para evitar las humedades y proteger el interior del edificio con el vallado del entorno y la instalación de cámaras de seguridad. También aseguraron que el precio de venta era «muy ajustado».

El anuncio de la venta del parador de Pajares está ahora al alcance de cualquiera. La página web de un grupo inmobiliario oferta el emblemático inmueble por 1,5 millones de euros. Aparece como una «excepcional y exclusiva» propiedad, en la categoría de edificios de segunda mano. Se trata de un buen reclamo para intentar encontrar un dueño al parador de Pajares, que lleva a la venta más de un año sin recibir apenas ofertas.

A pesar de la tardanza en reabrir sus puertas, el inmueble ya ha escrito su propia historia. Las instalaciones fueron inauguradas de la mano de la dirección general de Regiones Devastadas y tuvo unos años de esplendor. Fue decayendo poco a poco y, en los años setenta, fue excluido de la Red Nacional de Paradores. Cerró por primera vez en 1979 y, desde entonces, ha tenido una actividad intermitente. Lleva cerrado desde 2005, cuando un empresario lenense dejó su gestión alegando que el inmueble ya no resultaba rentable.

El candado permanece desde entonces en la puerta. Hubo varios anuncios de empresarios interesados en reabrir el hotel de alta montaña, pero ninguno llegó a buen puerto. En 2006, el Principado de Asturias renunció a seguir adelante con la concesión de uso que le había entregado «Turespaña» y dejó el inmueble en manos de Patrimonio del Estado. Durante cuatro años, el parador permaneció cerrado al público y sufrió varios actos vandálicos.

El Ministerio anunció la primera puja para adquirir el inmueble en noviembre de 2009. A través de una resolución, publicada en el Boletín Oficial del Estado, el parador salió a subasta por un precio de 771.600 euros. La partida fue bajando, a medida que las convocatorias quedaban desiertas, y finalmente se abrió la plica de Valmurián. Ha sido un largo recorrido que el anuncio de la inmobiliaria no puede resumir en las dos líneas que ofrece para llamar la atención de los posibles compradores: «Parador turístico, ideal para negocio o inversores. Complejo de restauración, ocio y servicio».