Mieres / Langreo, L. M. D.
Las minas españolas están al borde del cierre y de despedir a miles de trabajadores, pero cada vez se importa más carbón desde el extranjero. En 2012, el volumen de mineral importado creció en un 37,4 por ciento respecto al año anterior. De esta forma, llegaron al país un total de 22,7 millones de toneladas de carbón, que supusieron un desembolso de 1.924 millones de euros. Además, en plena crisis de la minería, puertos españoles como el de El Musel están siendo utilizados como estación de paso para revender el carbón de importación a otros países. De hecho, en 2012, las exportaciones de carbón -previamente comprado en el extranjero, porque la producción nacional se consume en su totalidad en las térmicas estatales- aumentó un 44,9%, alcanzando las 2,33 millones de toneladas.
Como respuesta a una serie de preguntas sobre la importación de carbón en España realizadas por el diputado socialista Antonio Trevín Lombán, el Gobierno explica que, según el Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales de la Agencia Estatal de Administración Tributaria «la importación de carbón en 2012 ascendió a 1.924 millones de euros», una cifra que es «un 7,2%» superior a la de 2011. En cuanto al volumen de carbón importado, «el incremento fue más importante» porque se compraron «22,7 millones de toneladas, un 37,4% sobre el volumen» del ejercicio anterior. De esta diferencia entre porcentajes se extrae que el carbón de importación se abarató este año, pasando de tener un coste de 108,51 euros por tonelada en 2011 a 84,67 euros el año pasado.
El Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales también apunta que desde España se exportó carbón, 2,33 millones de toneladas, valoradas en 320 millones de euros, lo que supone un 44,9 y un 31,5% sobre el año anterior. El precio del carbón exportado desde España pasó de los 163,8 a 137,5 euros por tonelada. Grandes compañías, como Goldman Sachs, propietarias de minas en países como Colombia, acumulan su carbón en puertos como el de El Musel, donde acumulan miles de toneladas a la espera de venderlas cuando mejor precio tenga esta mercancía. Mientras de las minas asturianas y castellano leonesas cada vez se saca menos mineral, con un futuro más que negro, en los puertos se hace acopio de carbón que acaba revendiéndose a otros países. El volumen de carbón de importación para generar energía también crece ante la cada vez más exigua producción de mineral autóctono, mermada por las decisiones de la Unión Europea y del Gobierno central, que están encaminando al cierra a la mayor parte de las explotaciones.
El déficit comercial en la compra y venta de carbón pasó de 1.532 millones en 2011 a 1.604 millones el año pasado, un 4,7%. Una cifra que contrasta con la reducción del 33,6% del déficit comercial global del comercio exterior español.
Antonio Trevín señaló que sólo desde el puerto de El Musel pudieron salir «medio millón de toneladas» de carbón. «Son grupos internacionales que reexportan el carbón», añadió. El diputado indicó que «el carbón sigue siendo importante» en la generación de energía, pero que al mismo tiempo se cierran minas. «El Gobierno del PP debe replantearse esta política», afirmó el diputado.
